Sentado en el tejado
esperando a que salga el Sol
Confiando en que uno de sus rayos
me entregue su calor,
para recuperar la temperatura
que cuando te fuiste desapareció.

Apareces en el último de mis sueños:
algo que no podía esperar.
Esta será la última vez,
ya no podremos volver a bailar.
Puede que no te vuelva a ver,
pues debo dejarte marchar.

Pero antes de irte
rescátame del tiempo
donde están encadenados
todos mis pensamientos
y los temores que me rodean
se acaban definiendo.

Y sentado de nuevo estoy
esta vez frente al mal.
Buscándote a ti:
una estrella fugaz
que me ayude a huir
junto a quien tenía que amar.

Y después de todo
llega el final.
Y camino de la mano del viento
en busca de algo
a lo que pueda llamar “mi hogar”.