Reina de la noche, Señora de la blancura:
dame tu bendición e ilumíname en la noche oscura.
Abrázame con tu manto de luz y sabiduría,
para que no me pierda y me sirva de guía.
Mándame tus estrellas para que marquen mi camino,
para que me protejan y pueda elegir mi destino.
Seca mis lágrimas aunque sean frías y amargas,
cura mis heridas: las que duelen y las que matan.
Reina de la noche, Señora de la blancura:
dame tu bendición y protección, Madre Luna.
Texto agregado el 24-08-2008, y leído por 201
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Lectores Opinan
03-01-2009
Es una oración más que un poema, ¿no crees?
Te felicito porque es de los pocod poemas que he encontrado que mantienen la sonoridad. La gente tiene la manía de entender escritura libre por el vale-todo y no es así. Dieciseis