Tu derrota



¿Por qué buscas consuelo?
Por qué te sientes culpable?
Por qué sientes cargo de conciencia?
Por qué peleas a diario, aún,
Por recuperar lo que nadie te ha quitado,
Por aquello que no has tenido nunca
Y sin embargo lo añoras?
Por qué anhelas exhausto
Un futuro que vives cada momento?
Por qué te interrogas, torturándote,
Sobre lo desconocido presente?
Por qué hoy estás conforme
Y mañana desengañado?

¿Que es lo que te obliga
Ha seguir, sin remedio,
Esa derrota?

¿Por qué cambiando tú rumbo
De forma constante,
Tu derrota no varía?



Aguadulce, agosto de 2008
José María de Benito