Aun no sé cuanto tiempo tome que las cosas vuelvan a ser como antes, cuanto demorara el que vuelva a sentirme en casa y volver a tener la confianza que tenia con Él, ni sé cuando se volverá a quebrantar mi corazón al verse seducido por tanto amor, tampoco sé cuando volverá a ser como antes mi relación con los demás, ya que todo lo que hice y deje los ha llenado de decepción, aunque realmente no se si esto es lo que hay en ellos o solo es lo que yo mismo pienso después de tanta confusión, después de tanto desacierto, de tanto pecado, de tanto dolor.
Alguien alguna vez me dijo que Dios se vale de todo, aun de los pecados y de los errores, tanto de los propios como de los ajenos para enseñarnos la Verdad, y que por lo tanto nada era en vano. Entonces, me pregunto si realmente valió la pena estar todo este tiempo tan alejado de Él, tan distante de todo y tan convencido de mentiras como si fueran verdades y tan metido dentro de mí mismo, que lo más importante dejó de importar. ¿Vale la pena? No lo sé. No estoy seguro, aunque estando en mi error pude abrir los ojos dentro de mi letargo, viendo las cosas desde otra perspectiva y ahora pienso diferente. ¿Aun el pecado sirvió? Siendo sincero, lo ignoro. Pero talvez esto me llevo a ser firme en mis decisiones y si es así realmente fue valioso, aunque fue mi decisión desaparecer y darle la espalda a Dios. Entonces me queda decir que Dios lo toma todo para bien, incluso la a veces irracional y animal estupidez humana, bueno, la mía, aunque, aparentemente, siempre hay otro camino, seguramente... un camino mejor.
|