En esto dias en que hubo Paro nocturno de transporte de pasajeros, de colectivos,
la ciudad estaba tranquila, aproveché para pasear con mi autito y recorrerla de punta a punta,
de Este a Oeste, pués es tan bonita.
El tema de la inseguridad, es fuerte, pero no nos amedrentó. Conversando con mi chofer llegamos a la sabia conclusión, de que sería venefioso para la ciudad, aplicar nuevamente aquella ley de las patentes que terminan en numeros pares o impares, cada uno con tres dias de via libre,
y el Domingo como siempre.
Lo que ocurre es que hay una enorme cantidad de vehiculos, vayas por donde vayas hay nudos, embotellamientos, impera una saturación tremenda de rodados de todo tipo, andando por las calles de esta hermoza ciudad de Buenos Aires.
Esto es irreversible. Por ello él que pueda hacerlo, para así ir todos los días comodo, que adquiera dos auto, un con cada patente. Nada más.
A lo mejor esto podría valer para horarios picos...
no decimos que no...como en toda primera mano siempre ha de faltar pintura.
Quisiera hablar del jugador de futbol, delantero de River Plate, campeón mundial, Burrito Ariel Ortega,
quien fuera suspendido por las autoridades del club por encontrarse en aparente estado de ebriedad al momento de conducir. Primero: Las imagenes televisivas que lo muestran supuestamente borracho, ya que también exiben una panorámica de cien metros del delantero caminando fresco como una Carmelita Descasa; sería,
solo porque su cabeza rosa el parante delantero denotando intoxicación alcoholica, y tal vez alguna cara, rosto, suena feo lo sé, de hombre pasado en sana joda; idéntico a lo de Charly García, ipotÉtica, o virtual situación que lo defenestraría (quiero agregar que si por tal caso el eximio jugador tuviera problemas adictivos, el club debería de comprender su condición de hombre sentado en el poder desde hace lustros y eximirlo de contrariedades, o sea mimarlo)
Es curioso, pero diferente a lo que vivenciara Julio Cortazar, hoy mismo el lector del presente está presente, y de alguna manera esto delata que ese futuro como tal no existe...por que hay una gama que comprende (oh, homenaje al tango) desde la Biblia hasta el destornillador.
El lector del presente, verdad en mano,
no obstante, permite que el personaje se meta en la piel del que lo encarna, denotando una contrariedad Pírrica de un tiempo compartido.
Pero quisiera destacar dos aspectos importantes,
de esta redacción, uno es la Ley de las patentes con terminación diferente, para la circulación parcial en la ciudad capital del pais, y la otra la defensa desairada hacia el jugador de futbol Ariel Ortega. Además del agradecimiento a los gentiles lectores que acompañan mis cuentos.