Abrió el sobre con el abrecartas de bronce de su escritorio lleno de papeles. Estaba algo desesperada y necesitaba una rápida respuesta de eso que nunca supo ni nunca sabrá qué fue.

Ella cree que es Amor.
Él también lo cree.

Arrugó el sobre, tranformándolo en una pelotita de papel y lo lanzó tal cual una moneda es lanzada en una fuente... por sobre su hombro... golpeó una, dos, tres veces en el suelo y quedó estática por el resto de los días. Un papel blanco como la nieve doblado en dos contenía el secreto de su desesperación. Esa misma desesperación que, a pesar de la distancia, también apasionaba al emisor.

Quizás les haga parecer que ambos personajes los conocen. Quizás sí, quizás sean visiones de cada uno. Quizás los haga ver reales. Quizás hasta quiero que sean reales. Pero ese no es el punto de la historia.

La real historia es corta, pero todos sabemos que al final, de verdad y de corazón, sabemos que es un final feliz...

the letter said...


"I'm always here to aid you and love you as I always have done.

H."


and... for unknown reasons... she never knew who sent that letter.

Until he appeared... kissed her and loved her... in fact, he still loves her.

Horacio Caballero was his name. Peace War was her name.

and their names should never be forgotten.

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Dicen que los vieron en Chiloé.
Dicen que a la mano de él, iba una niña llamada Martina, y en la mano de ella un niño llamado Gabriel.
Dicen que al ser abuelos, desaparecieron y se internaron en el bosque frondoso de Temuco.
Otros dicen que viajaron, al viejo continente, a conocer Italia, Holanda, Inglaterra y Finlandia. Pero que volvieron a ver como sus vidas reaparecían en una ciudad llamada Valparaíso. Y dicen que lo mejor de todo, es que al volver, el Mar, los Cerros y el Cielo porteño, se acordaban de ellos.

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For R.