Si de verdad me escuchas, tú bien sabes que yo no creo en estas cosas... tú no estás acá, estás allá arriba... pero necesitaba un tiempo a solas contigo, y creo que no existe otro lugar mejor.
La verdad es que muchas veces te he extrañado y he deseado que estés acá conmigo, todo sería tan distinto papá, si tú me acomapañaras no me pasarían tantas cosas...no digo que mamá no lo haga bien, pero es que ella no me entiende. Tú eras el viejito idiota, ese que no le gustaba que lo molestaran, tú eras el que leía el diario cada domingo sentado en el sofá del living y sin zapatos, tú eras el que usaba esos lentes -que me recuerdan un a poco a Allende- y usaba esos chalequitos plomos y azules que yo aún conservo en mi closet, el que era Demócrata Cristiano... pero los de los buenos y antiguos demócratas!, tú eras quién se enrollaba en la alfombra para tomar una siesta, y que de vez en cuando hacías que me acurrucara en tí para dormir los dos en el sillón, -Mientras mamá reclama que la TV queda encendida y la apaga- .
De tí aprendí y quise la historia, también quizás el Inglés... de tí aprendí a leer grandes libros y a querer viajar por el mundo, de tí aprendí a querer ser grande sin deberle favores a nadie, sin lamerle los zapatos a nadie, sin malas intenciones, sin tratar de beneficiarme con los logros de los demás.
Tan poquito que te tuve conmigo, pero tanto que te recuerdo...
Aquél día en que aprendí a caminar (Bien grande ya) y que tú llegabas del trabajo y yo simplemente me solté de los brazos y llegué hasta tí corriendo... las películas de guerra que veíamos cuando era nena (esas que aun me dan terror). Cuando no quería dormir solita y me echaba en la alfombra para que no me fueran a dejar a mi pieza, los días que dormía con los dos.. aquél fuerte codazo que una vez te pegué en la cara por equivocación... perdóname por eso, yo sé que te dolió y te molestó.
No sé ni siquiera si alcanzé a ser tu nenita como mi hermana si lo fue, pero si sé que todo el tiempo que pude estuve contigo, que nos íbamos a La Selecta donde conocí a la panchita (Te mueres de lo grande que está, creo que ya va en primero medio) y donde gastaba toneladas de servilletas a diario haciendo dibujitos en ellas con tu lápiz tinta que mamá aun guarda en su cajón (Ella me prometió que cuando me vaya a la universidad me lo va a dar).
Recuerdo los viejitos que me daban monedas para que siguiera entretenida comprando raspes todo el día... ¿Te acuerdas? Con $100 jugaba toda la tarde... Eran de ese programa del Pollo Fuentes... ¿Venga conmigo se llamaba?.
También me acuerdo muy bien cuando te enfermaste por primera vez y estuviste mucho tiempo hospitalizado, cuando entraba por el ventanal para poder verte y darte besitos... cuando volaban los queltehues signos de mal augurios y el día se ponía nublado y triste, pero espero que sepas que yo siempre estuve ahí, que recuerdo tu carita con esa mascarilla fea que a mi no me gustaba.. que recuerdo subirme a tu cama para poder abrazarte fuerte.
Siento no poder recordar a mamá hasta los ocho años, quizás eso me aleja un poquito de ella de repente... siento que mi infancia la pasé contigo, mis recuerdos y mi pequeña mente infantil me dicen con seguridad que no había otra persona en el mundo además de tí.
Recuerdas cuando ya estabas enfermo cuando te caías, y eras muy porfiado... yo sé que no eras perfecto papá, pero eras mi papá y si tu me hubieses castigado de la manera más injusta del mundo yo simplemente lo habría aceptado, porque tú eras como yo, porque tú me entendías... porque sé que querías lo mejor.
Entonces perdóname por no haber llegado antes papito, yo quería... perdóname por no haber sido tu nenita durante muchos más años y por no haberte podido disfrutar... perdóname si alguna vez no te presté atención, o si alguna vez me enojé, si te hice rabiar o te preocupé.
Tú te enojabas mucho, yo lo sé... recuerdo cuando estaba desenrredando una madeja de lana y me retaste porque creías que le enrredaba más... entonces mi hermana dijo "Pero así se desenrreda!" pero yo no quería seguir porque a tí no te gustó... y me asustaba cuando te enojabas pero me gustaba sentirte a mi lado.
Y cuando te fuiste no lloré, cuando todos lloraron yo no lloré... ¿Pero te cuento un secreto? Cada día me acuerdo de tí y me da un poquito de pena, muchas tardes lloré con pataletas porque no me llevaste contigo, y te esperé muchas noches para que me vinieras a buscar... tanto que despúes lo olvidé, tanto que despúes me resigné.
¿Soy el soporte de mamá cierto? Si, siempre lo pensé, yo solo espero que mis desiciones futuras no arriesguen eso, ella se equivoca mucho... pero me quiere tanto como te quiso a tí, yo lo sé.
Estoy muy confundida, pero esta charla contigo papá me hará sentir mucho mejor...
Espérame, te prometo que algún día volveré a verte, y tú prométeme que algun día nos veremos de nuevo y te sentirás orgulloso de lo que quise ser, orgulloso de tu nenita que trató toda la vida de imitarte... ¿Lo harías papi?.