Entonces, vi que cerraste los ojos y comenzaste a dormir. Ya todos se han dormido también y yo me he quedado aquí, despierto, y no hago otra cosa mas que mirarte, mirarte como nunca lo había hecho, mirándote hacer algo que nunca te vi hacer.¿O sí? Y te miro por mucho tiempo dormida. Aprovechare para decirte en silencio mi sentir.

No niego que al verte así, me aguanto las ganas de acariciar tu pelo, de recorrer con mis dedos el contorno de tu oído, de sentir en mis manos tu rostro, de sentir tus labios con los míos; pero, ¿Qué excusa pondré si te despierto?

La luz de la luna se filtra por la ventana y esta iluminando en este momento tu ser. Y te veo ahí tan cercana y tan mía, que no me canso de decirte en silencio lo demasiado que te he estado amando sin que te des cuenta y de lo cuanto que hace falta de ti en mí.

Hubo un tiempo en que estuviste tan alejada de mi, que no se si importe lo que te digo. Se que amarte así es una locura, ya que ninguno de los dos sabemos que nos depara el destino.

Pero, estas ahí, tan tranquila y tan feliz, que no quisiera molestarte con este delirio. Y dejare todo esto guardado muy dentro de mi corazón, para no perturbar tus sueños con mis razonamientos.

Y es así que estoy aquí solo mirándote dormir, y te digo que te amo entre sueños y que nunca podré alejarme de ti. Pero mañana, tal ves solo te diga buenos días…

O tal ves…

No diga nada.