Trompo
Fuente de sabor zumbante,
Tarareas al viento caminos de tierra;
Conversas temblando, en el eje del caos,
Para alcanzar el centro de pasión plena.
Derrochas trajes de hilos, con tu pasional juego.
Abocando al barro, sudor del lúdico,
Que moja el camino, que tienta a la suerte,
Buena suerte, mala suerte, es tu camino,
Y yo te miro en la noción del girar simple.
Pavo real, con aura de aurora,
Naces de la mañana y sigues girando,
En la pluma un recuerdo,
En el giro tu sonrisa.
Todo año es un tiempo corto,
Un largo segundo quiero verte,
Un tercero cae en el vuelo,
En un cuarto besas la tierra,
En un quinto erótisas al danzar,
Y en el sex-to caes cansado,
Por amor y labrar, una pequeña obra de arte,
De delgadas ramajes y esencia.
Colibrí de tierra,
Cucarro cantautor chileno,
a todo año enamoras,
con tu susurrar de huaso
y te soñar sereno.
Crecen flores de tu camino,
Crecen árboles, crecen pinos
Tus hijos zumban en el corazón
Del cuatrero, que de picado lanza
A la pelea, a este becerro,
Que suena a tierra, y suena a sueños.
Madera en la vida,
Eres cumplir deseoso.
Ya ahora caes, caes a dormir
De nuevo, zumbas armonioso
En el silencio fantasmal,
de un recuerdo amoroso.
Levantas al cuerpo dócil,
Amo prodigioso, le arropas,
Le calientas en tus manos,
Para que tome de nuevo gozo
Y así renazca de las cenizas
Como quien nació un día,
Y al final te encuentres
Con el hermoso medio día. |