Estoy podrido de alejarme de lo genuino,
harto de ser por momentos un personaje que odio, que niego, que no reconozco mio, y sin excusas alguna, lo reconozco lo mas abiertamente que puedo, para de una vez por todas sacarlo de mi.
Sacar de mi esa parte que no es mia, esa antigua reaccion de quincieañero evolucionada en el payaso y gato de la noche, ya no me importa, no me importa hace rato, y como toda costumbre se tomo su tiempo en empezar a dejarme, en permitirme escribir, reconocerla y destruirla.
Ahora miraré la vida de nuevo con 14 años, y actuaré distinto, no se como, esta vez no lo pensaré.
Eso es lo hermoso, el tiempo puede volver atrás de maneras muy diversas, convenientes y hasta evolutivas.
El nene de 31 años será el nene donde deba serlo, y será feliz, aunque extrañe de vez en cuando las consecuencias de ciertas caretas que usó y que le abrieron cierto tipo de puertas.
Gracias a mi, y a mi universo, por empezar a escribir sobre cambios hechos y no sobre ilusiones a futuro.
Un dia de estos compartiré un poco mas del dolor de amor tan votado en mis otros escritos, pero hoy, con la misma pasión que quizás no encuentren en uds. reflejadas, he hecho un pequeño avance en mi doblegación para conocerme un poquito mas.
Cada vez mas contento y mas lejos de los carteles.

Don Dani