Cosechaba mi amor en el árbol de manzana
Lo regaba con dulsura y con ternura
Pero tu ausencia lo marchitaba
Y solo recolectaba amargos recuerdos

Recogía los pedazos de mi corazón
Caminaba en la sombra de tu soledad,
Ya se moría poco a poco mi ilusión
Engañada y herida sin piedad...

De pronto apareció una manzana,
No era ni tan joven ni tan anciana,
Era perfecta, dulce, roja y bonita
Igual que tu linda y bella carita

Regresabas, lo sabía ahora
Y no podía esperar la hora
De otra ves verte y abrazarte,
Mientras intentaba de nuevo besarte
Ya no existía el abandono
El destierro ya no estaba
La ausencia ni pesaba
Y eso si que me importaba

Llegabas, era lo cierto
Por ti yo haría un concierto
De besos, canciones y gratitudes
Porque la manzana lo anunciaba
Que contigo además de gracias y virtudes
obtendria bendición y alegria pasada.