Había una vez un pobre joven, pobre en muchos sentidos; económicamente, moralmente, intelectualmente y pobre de salud, pero el tenia una noviecita que era todo lo contrario.
Un día el joven tuvo un aparatoso accidente en el que por poco pierde su vida. Su familia estaba lejos, sus amigos lejos y su noviecita también, pero ella de vez en cuando se acordaba de el y le hablaba nada mas por consideración, nada mas que por eso.
El joven salió del hospital y al regresar a casa nadie lo esperaba, ni su familia, ni sus amigos, ni su noviecita aunque esta se encontraba a muchos kilómetros de distancia, pero como el era egoísta puso en este cuento que su noviecita tampoco lo esperaba.
Pasaban los días y el joven estaba muriendo de dolor y soledad. Sus únicos amigos eran los libros que ya había leído tantas veces y el se decía -Si mi novia estuviera aqui, me estaria leyendo los cuentos que mas me gustan y eso seria muy bueno- y al pensar en eso se ponía mas triste, entonces seguía leyendo, se imaginaba que ella estaba ahí leyéndole y cuando el le decía que levantara un poco mas el tono para escuchar mejor, reaccionaba inmediatamente y se decía -¿pero que me pasa? o es que veo ilusiones o es que estoy loco, pero si estoy solo, este golpe si que me afecto - pero el frecuentemente pensaba que su noviecita estaba junto a el, leyéndole sus cuentos, novelas o poemas preferidos.
A veces tenían discusiones sobre esto, un día ella le leía un cuento de un loco que después de suicidarse mataba a sus padres y el repuso - loco estaba el escritor, ¡ un suicida que luego se convierte en homicida ¡ jajaja- y ella le reprocho
-es un cuento y nada mas ¿Quién dice que todo lo que esta escrito debe ser cierto? Y continúo leyendo.
Llego la noche y el sueño se apodero del joven, le dijo buenos noches a su noviecita y se durmió.
Al levantarse el se encontraba peor, tal ves le quedarían unas cuatro horas de vida y el quiso que en esos últimos momentos ella estuviese ahí leyéndole y acompañándolo en su soledad.
Ella leyó varios cuentos, pero el quería escuchar un ultimo cuento inventado por ella, el tiempo del pobre joven estaba por terminar o por comenzar, todo depende de que lado se mire. Pero su noviecita le dijo que ella no podía por mas que quisiera, que era el quien debía inventarlo, el se molesto mucho porque ella no le quiso conceder su ultimo deseo, entonces ella lo miro tiernamente, tomo su manos y le dijo con mucha ternura (pues así era como al joven le hubiese gustado que su novia actuara) Mi querido, yo no puedo inventar nada, solo soy parte de tu imaginación, yo solo...
Y el joven se echo a llorar, ella no termino de hablar, lo ultimo que ella pronuncio fue la palabra “solo” y así era como aquel joven se encontraba, nada mas con uno novia imaginaria que ya se había ido para no verlo morir en tan grande soledad.
P.D nada mas es un cuento mi niña. ¿Quién dice que todo lo que esta escrito debe ser cierto? |