Escudo magnético,
rodea mi ser, me mortifica.
Barrera invisible que me disloca
Me aleja de la luz indispensable.
Pared que se alzó a mí alrededor,
y mí alma no pudo ultrapasar:
cae al suelo y se hace añicos.
Pedazos intentan huir inútilmente,
tampoco llegan a juntarse.
Se trasforman en astillas, se quedan olvidados,
Los rayos del sol alcanzan las partículas que me forman,
y sus reflejos hieren el amor propio.
Partes respirando, sin embargo apáticas y desfalleciendo.
Alma rota no se tira a la nada,
es cubierta con el óxido oscuro de la infelicidad.
Alma pisoteada, alma sin esperanza.
Vino el atardecer, el tiempo se hizo noche cerrada,
se aproxima la nube negra y lluviosa.
Alma mojada, alma con frío.
Puerta trabada, ventana trabada.
Alma siendo asfixiada,
dejando escapar
la esencia de una vida.

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OBS.: Esta poesía hace parte del libro:
"Voz del Alma" – Autora: Rosimeire Leal da Motta
Editora CBJE - RJ - Noviembre/ 2005 - Poesía y Prosa.
Brasil