El punto es que me enamoro de la vida,
Y la vida me da la espalda,
Me enamoro de la gente,
De colores y texturas,
De culturas y comidas,
Cada día me enamoro más de algo que no es mío.
Me enamoro de los eternos enamorados,
De los besos sin amor,
De la sangre y de los huesos.
Y me siento tan despreciada por la humanidad…
Texto agregado el 21-06-2008, y leído por 117
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