NUESTROS PADRES

Esta historia se desarrolla en la casa de la familia Galíndez. El padre, un militar retirado; su esposa y sus dos hijos, Laura e Iván.

En la cocina .

Laura (ingresando) - Hola mami..

Madre (girando la cabeza): - ¡Oh! No te sentí llegar.

Laura (sonriendo): - Me acaba de traer Pedro. Hoy fue a buscarme en el auto de su padre.

Madre (con voz de reproche): - Ya sabés que no me gusta que te traiga ese muchacho, no es de fiar, anda en cosas raras y además me enteré que anduvo curioseando. Le preguntó al panadero si hacía mucho que vivíamos en el barrio..

Laura (con voz de fastidio): -¡ Estoy harta de que controlen mi vida, tus reproches son injustos. Pedro es mejor tipo que muchos de los hijos de tus amigas.! ¿Porqué no puedo disfrutar de tener amigos y compartir con ellos? Nunca me dejan hablar con nadie que ustedes no elijan.

Termina la frase casi gritando y sale de la cocina pegando un portazo. La madre queda mirando la puerta con expresión de disgusto.

Entra un muchacho, va directamente a la mesada y se sirve una manzana.

Iván (entre bostezos): - Buenas – mira a la mujer - Che vieja, que cara tenés.
Madre (sin abandonar su tono quejoso): - Es tu hermana, se ha vuelto intratable, me tiene angustiada.
Iván: - Pero vieja, dejala hacer su vida, no la jodas.
Madre: - ¿preocuparme por mis hijos es joder? (comienza a llorisquear)
Iván: - A veces sí..... todo te molesta..
Madre: Estoy preocupada. Ella con ese Pedro, un desconocido, y vos con tu obsesión por estudiar música en vez de estudiar algo decente. ¿qué pasa con mis hijos? (se toma de los cabellos y solloza más fuerte)

Haciendo un gesto de hartazgo el muchacho se marcha de la cocina mientras sigue comiendo tranquilamente la manzana.

En otra habitación, laura está sentada frente a una computadora leyendo atentamente la información de una página. Entra el joven.

Iván: - hola flaca.
Laura: hola Iván (responde con poco ánimo).
Iván: - la vieja está enojada con vos y de paso la ligué yo.
Laura: Ella siempre está en contra de todo lo que hago.(con un movimiento rápido del mouse oculta a la mirada de su hermano la página que estaba viendo en la computadora)
Iván: También está en contra de lo que hago yo. Nada la conforma. (curioso se da cuenta de la maniobra de su hermana) Che....¿qué mirabas?
Laura: - Nada, nada interesante, algo que me dijo Pedro que mirara. (rie nerviosa) ...curioso.
Iván: - en qué andarán ustedes dos (ríe)

En ese momento entra un hombre de porte imponente que parece escuchar la última frase..

Padre: - ¿en que andará quien?
Iván (haciéndose el desentendido): - Nadie papá , sólo son tonterías mías para enojar a Laurita.
Padre: Estuve hablando con vuestra madre y ya no soporto más quejas sobre el comportamiento de ustedes dos. A partir de este mismo instante van a cambiar o los enviaré a lugares dónde los educarán como se debe.

Si más palabras el hombre se retira de la habitación .

Laura: - Me van a mandar a ese odioso internado en Inglaterra. Antes me mato.
Iván: - A mí ya me ha dicho que me va a mandar a la Academia Militar.

Ambos jóvenes quedan cabizbajos y en silencio.

En la cocina.

Padre: - Te dije que era peligroso ese colegio dónde van hijos de cualquiera.
Madre: - Pensé que sería mejor para todos, no despertaría sospechas en este barrio si hacen una vida como la de los otros chicos.
Padre: - Ese tal Pedro es el que me preocupa, busqué en los archivos y su padre era Montonero.
Madre (se acerca a la puerta y la abre fijándose que nadie esté cerca, comprueba que los hijos no están y aliviada cierra y vuelve junto a su esposo): - No me gusta , tengo miedo, me enteré que anduvo haciendo preguntas sobre los chicos.
Padre: - No te preocupes, hay gente que me ayudará, si anda en lo que sospecho ya sabrá quien es Galíndez.

Con gesto airado sale de la cocina.

Pasan unos días.

Suena el teléfono en el living. Atiende Iván. Se escucha la voz de los padres conversando en la cocina.

Iván: - Hola
Laura (al otro lado de la línea): - ¿Iván? . Salí de la casa ya. No me nombres. Salí rápido.
Iván (sorprendido no sabe qué responder)
Laura: Salí urgente. No preguntes..
Iván: - ¿Pero...... que pasa?
Laura (con voz tensa): Iván, prestá atención, esos no son nuestros padres. Te estoy esperando en la casa vecina con nuestra verdadera abuela y el juez. Hoy secuestraron a Pedro que es quien nos ubicó y temen por su suerte. Creeme....por favor....¡ salí de esa casa ya!

El joven cuelga el teléfono y como atontado sale de la casa. Pasados unos instantes, se escucha la sirena de un vehículo policial que se acerca.