Siempre estuve solo en este dia, mi papá, despues de yo nacer, se casó y abandonó a mi madre la que con mi embarzo devió soportar las penurias mas grandes de su vida. Al nacer fui negado, mi padre escribió a mi mamá, que me buscrara padre pueto que el no era, mas tormento para mi vieja, que en paz descance. Al mes de nacido mi abuela una vieja bien revelde era la maestra del pueblo y a la que todo el mundo admiraban y temian, envió una de sus muchachas del servicio a que me tragera para comprobar mi patrenidad, la que al verme quedó perpleja, como conjelada por mi parecido fisico de quien hacia unos dias me habia negado por culpa de ella, luego mi mamá me colocó de nombre Manuel Segundo y a el no le gustó por que el hijo que esperaba su esposa era el que debia llevar ese nombre el que yo muchas veces no deseaba tener.
Me bautizó para nada, por que igual nunca tuvo que ver con nosotros somos tres hermanos de esa union.