TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / sergio_vizcarra / Extinción

[C:357321]

El cielo estaba ya claro pero el sol todavía no aparecía cuando el Viejo despertó. Miró a sus compañeros y sintió el miedo en el aire.
-¿Será hoy?-. Preguntó el Flaco.
-No cabe duda-. Dijo el Viejo.
El Alto miraba el suelo, sin atreverse a mirar al Viejo.
-¿Por qué?-. Preguntó y no era primera vez que lo hacía.
-Ya no vale la pena preguntarse eso-. Dijo el Viejo-. Nunca lo valió.
El Gordo, que llevaba días sin hablar, los miró uno a uno y al cielo.
-Será un bonito día-. Dijo.
Todos lo miraron.
-No entiendo-. Dijo el Flaco-. Nunca dañamos a los Monstruos y ellos ya acabaron con casi todos nosotros.
-Así es la naturaleza-. Dijo el Viejo-. Toda especie tarde o temprano cae frente a un depredador más fuerte.
-Pero nosotros dominamos el planeta durante miles de años-. Dijo el Flaco.
-Ya no vale la pena-. Dijo, resignado, el Alto.
Todos guardaron silencio un largo rato, mientras el sol aparecía en el cielo. El Flaco rompió el silencio.
-¿Y el valle oculto entre las montañas?-. Preguntó.
-Eso es sólo un mito-. Dijo el Gordo.
-Además, aunque fuese verdad ese lugar-. Dijo el Viejo-. Aunque intentásemos llegar allá, incluso si lo hiciéramos, los Monstruos tarde o temprano nos encontrarían. Sería sólo alargar la esperanza y con ella la angustia.
-¿Entonces esto es por fin la extinción?-. Preguntó el Flaco.
Nadie dijo nada, sólo se miraron en silencio.
-Debemos ser dignos-. Dijo el Viejo-. No podemos caer en la desesperación o la humillación. Somos los últimos, no debemos desesperar.
-Nada de llantos-. Dijo el Gordo.
-Ni súplicas-. Dijo el Alto.
-Ni siquiera cuando los dientes de acero de los Monstruos nos destrocen-. Dijo el Flaco.
Se miraron de nuevo en silencio, sellando el pacto que acababan de formar.
De pronto, un murmullo llegó a ellos cada vez más fuerte. Eran los rugidos de los Monstruos que se acercaban.
-Es la hora-. Dijo el Viejo.
-La última-. Dijo el Gordo.
Los rugidos estaban cada segundo más cerca y de pronto los monstruos se dejaron ver. Con sus dientes de acero los destrozaron uno a uno. El último en caer fue el Viejo. No lloró, ni suplicó. Fue siempre digno, aunque era ya el último de su especie. El último alerce del último bosque nativo.

Texto agregado el 14-06-2008, y leído por 147 visitantes. (0 votos)


Lectores Opinan
15-06-2008 buen relato. me gusto. deberias escribir mas historias de este tipo. tienes madera. saludos carolina52
14-06-2008 Bueno, dinámico. Interesa y sorprende. Me gusto. terac
14-06-2008 Lindo relato, sergio. Al final sorprende, como dicen que hacen los buenos cuentos. Saludos arqui
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]