El escenario teatral esta siendo ocupado por Quique quien no permite que la obra épica sobre la vida de Cintia Bemudez continúe su normal desarrollo, que con un arma de grueso calibre amenaza a la troup que asoma con sus enseres de entre bambalinas para pareciera hacerse cargo del argumento.
Quique: Los Argentinos somos seres que habitamos una tierra generosa donde tenemos mucho espacio que ocupar, dominar, y además donde cultivar,
pero comparado con otras naciones somos un país con pocos habitantes por metro cuadrado.
Nos caracteriza el don de la habilidad para encontrar la formula de sortear los limites y encontrar la manera de usar las virtudes en general para otros fines, es decir,
solemos poner a prueba todas las cosas que existen. Si la democracia llegara o llegase a triunfar en este país ponga le la firma que ese sistema es buenisimo y sirve de verdad.
Todo viene a cuento de que tengo que justificar mi actitud de bloquear el escenario hasta tanto la presidenta y de angelis se pongan de acuerdo y hagan las pases, pues si ellos no se amigan yo no podré continuar mi camino que es secundar a Cintia en su aventuras. Por lo tanto hago un allanamiento del espacio y me apodero de sus habitantes, teniendo ustedes que obedecer mientras dure este bloqueo.
La inseguridad hace tiempo que trasbaso los limites de su esencia convirtiéndose en un estado de anarquía y exterminio. Por lo tanto todo lo que sea piquete tiene que ser visto como un vaso constrictor que purificará el infierno instalado, haciendo posible una vuelta a la normalidad.
Usted Cintia póngase esta peluca e imite a Cristina al compás de mi discurso,
yo por mi parte colocaré esta negra funda en mi diente del medio e interpretaré al máximo dirigente del Agro De Angelis.
Cintia: Ay De Angelis soy casada.
Quique: Eso no importa solo tiene que volver al treinta y cinco por ciento en las retenciones a la exportación de granos a como estábamos antes del conflicto.
Cintia: Mi marido no va a querer.