Esta es una de las tantas noches en las que me arrepiento de la carrera que elegí. Tendría que haber escuchado esas sabias palabras que me decían que no, que siga por otro rumbo, que con los números me iba a ir mejor. Pero no, yo fiel a mi misma, acá estoy frente al tablero, y no se me ocurre ningún diseño. Mañana es la primer entrega, y en este mes y medio que nos dieron, no se me ocurrió nada. Otra noche más en vela y nada. No me sale nada.
Pasa que el amor, se me filtra por cada uno de mis sentidos. Y la creatividad la tengo reservada para otra cosa. Este sábado es San Valentín, y quiero que me agasajo sea realmente especial, pero sin llegar a ser cursi. Y se me ocurren tantas opciones… una cena romántica bajo la luz de la luna… en la plaza del monumento. Claro que deberíamos treparnos por las rejas e intentar que ninguno de los guardias de la embajada nos vea. Y en ese lugar, en el que nos dimos el primer beso, entregarle el sobre con todos mis regalos: una carta, un mini retrato hecho por mi, y mi postal favorita, la de las pirámides de la Luna y el Sol…
Pero no! Otra vez me fui por las ramas, tengo que concentrarme, mañana se presentan los bocetos y yo sin nada para llevar.
Podría copiarme de alguna prenda de mi hermana mayor, o quizás de la menor. Pero tengo que entrar muy despacio. Lucila tiene el sueño más pesado, debería entrar en su habitación.
Aunque pensándolo bien, su ropa no se ajusta mucho a la consigna. No sé … necesito otro café. En la cocina con otro fondo y otra luz, quizás se me ocurra algo.
Tengo que apurarme, son las cuatro y media de la madrugada. En dos horas debería tener algo terminado, darme un baño rápido, y salir para la facu. Espero no encontrarme en el colectivo con Andrés. Lo único que me falta en este momento es recibir otro reproche. Ya le explique tantas veces que no es mi culpa que no me gusten los hombres. Tampoco es su culpa. Es que no soportaría ver su cara mezcla de odio y autocompasión y su constante “no entiendo”.
Miro el reloj…las cinco de la mañana, bueno, a ver … un diseño moderno pero con algún toque retro, le voy a poner un poco de terciopelo, encaje y lúrex. Después de todo, no es más que un boceto.
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