Arde en un fósforo.

Como en un instante en que se enciende un fósforo,
Cuando con su fuego arde,
Ese palillo flameante, espigado y estrecho,
Frágil leño de amor
Así abracé una esperanza…
Así quemada por la llama, encendió tu pasión,
Ardió serena y vagabunda y se apagó en mi alma.
Me he herido por darle bola a la nostalgia,
Una farsa compró con fianza mi corazón,
Rescato de las noches sombrías
Las vendas que cauterizan mis venas;
Pero ellas no curan
El olvido, que no sabe de tu muerte,
De tu indiferencia.
Como ave que acude a los recados concisos
En cada vuelo preciso,
Junto al mar esperando,
Junto al crepúsculo moviéndose en el cielo
Está el amor divagando
Y grita, te nombra obstinado para que no me dejes,
Para que conmigo te quedes.
Me encadeno a sueños y a palabras de magdalenas,
Le pongo candado al espíritu
Entre el soplo que apagó la llama que me condena,
Para que aquí te quedes.
No tengo remordimientos
No pude retenerte,
Bastó solo un momento,
Un feliz momento
Aunque durara tan poco, tan poco como la llama
Que arde en un fósforo.-