Dos haditas que convergen y se definen mutuamente como un desastre
Dos corazones y uno en realidad
Con tanta fuerza capaz de hacer temblar el mar
Una nueva vida en el horizonte
Que desde mi velero no consigo avistar

Una niña que chilla que no
Y no sabe pronunciar un te necesito
Unas alas rotas que con mis manos destroce, una hada frágil que solo ante ti es capaz de derribar barreras y comentarte en forma de monologo sus verdaderos fracasos
Un hada alta y fuerte, altanera y resabiada que ante nadie baja la cabeza, un hada luchadora que tras un espejo se esconde, a escribir sus más profundo temores
Un hada temerosa y tímida que cada pasito lo reflexiona como quien piensa en firmar un contracto para entregar su alma
Un hada fuerte que sabe muy bien qué camino seguir y que planta amapolas en sus sendero para no perderse otra vez
Un hada que cuando se siente sola dice que va a dejar de querer y que no va a volver a ver el sol
Un hada que le cuenta a la luna cuanto adora a sus duendes y haditas, un hada que quiere ver el mar brillar mas azul en su noche de brujas
Un hada que con el corazón en la mano te dice que para siempre
Un hada que con los ojos llenos de alegría llora buenos recuerdos y se plantea un diario en blanco
Un hada que quiere rasgar páginas de su cuaderno de dibujo y comer piruletas a escondidas
Un hada que rodeada de personajes inventa un centro como regalo de cumpleaños
Un hada que tras el paso del tiempo sigue dibujando a solas y por las noches las piezas de un puzle sin sentido
Un puzle donde tu estas y eres la unión entre las piezas
Un hada que busca su equilibrio en lo más sencillo en un te quiero
Un puzle que quiero tirar al mar y no verlo más, pues está aquí en mi día a día y no lo necesito para recordar
Un hada que con esto solo quiere pedir perdón en un abrazo
Un hada que una vez más no es capaz de decir te amo, que engaña a su corazón y lo condena a la soledad, pero sin embargo no puede despedirse sin decirte esta palabra:
Gracias