ya no se como apaciguar este sentimiento,
que me carcome por dentro,
por la ingenuidad de un corazón que espera una oportunidad de demostrar lo que siente....
pero lo peor,
es que no se como hacerle ver a este corazón,
lleno de heridas causadas por desprecios de aquella diosa,
que no hay oportunidad, y sobre todo con ella,
ay si, con ella...
pues ella, ¡ay!, esa mujer que se adueña de mis sueños con su mirada;
ella, que me entra en un mundo de ilusión y fantasía,
ella, que con una sonriza y su alegria, se adueño de mi vida,
me la arrebato de mis brazos, dejandome
a la merced de la realidad, de aquella realidad que me trae desprecio y soledad, destruyendo la fe y la ilusión
de este corazón que por primera vez es victima de las heridas del amor y de una una hermosa e ingrata mujer....
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