El cíclope está viejo
viejo y cansado,
su corazón ni late
ni está parado
Y su sirena,
lo hechizó con su canto,
mira que pena.
El cíclope está viejo,
no se levanta,
ni siquiera lo verde
su mal espanta.
Y su sirena,
sigue canta que canta
coplas obscenas.
El cíclope fue joven,
alto y fornido
era imperial con brillo,
bajo ha caído.
Y su sirena,
se ríe de sus arrugas
! mala condena ¡
El cíclope medraba,
siempre imponente,
ahora su calvoróta
cuelga impotente.
Y su sirena,
juega con los tritones
del mar de Aténas.
El cíclope se agobia,
se desespera,
y pide ayuda a Circe,
cruel hechicera.
Y su sirena,
da brillo a sus escamas
de luna llena.
El cíclope se alegra,
Circe le ha dado
la Pócima Celeste,
! Ya está curado ¡
Y su sirena,
viéndolo tan contento,
lo ignora, ajena.
El cíclope se yergue,
busca, la encuentra,
y ahora que ya la tiene...
¿ por donde entra ?
Y su sirena,
se muere de la risa,
! menuda escena ¡
Moraleja: La incógnita no es tanta,
! solo tiene que darle por donde canta. ¡
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