NEUROSIS

Por que no entienden que tengo prisa, la gente es una egoísta que solo piensa en si misma, no se dan cuenta que si no se quitan me van a perjudicar y puedo perder mi trabajo, vaya como si ellos pagaran mis cuentas, todos tienen el cerebro hueco, este imbécil se mete y va muy despacio -por que no desapareces idiota-, seguramente eres el dueño de tu negocio y no entiendes que tengo que llegar temprano, -estúpido me estas bloqueando-, ni siquiera sabes conducir.

No encontré ni un maldito lugar, por que carajo hay tantos autos, por que no pueden venirse en le transporte publico y dejar espacio para la gente que tenemos necesidad de transportarnos, ahora seguramente el estúpido del oficial de transito me infraccionara por que quede fuera del limite y estorbando una rampa para discapacitados, a quien carajos se le ocurre poner una rampa en la orilla de la calle, esta ciudad es una porquería.

El imbécil de mi jefe me ignoró, seguramente me guardara el regaño espera a que cometa otro error para desquitar su coraje conmigo, es un frustrado mediocre que se ensaña conmigo, seguramente consiguió su empleo por alguna palanca. Se acabaron el agua para el café, en esta porquería de oficina todos son unos egoístas que no piensan que los demás también tomamos café, ahora tendré que colocar el agua para que otros aprovechen y se sirvan café; son unos oportunistas.

Llevo media hora en esta maldita fila, que lento e inepto es el cajero, que se cree que no tengo nada que hacer, quien lo contrataría con lo tonto que es, que no sabe que tengo muchísimo trabajo en la oficina y no tengo tiempo para perder, pero claro este imbécil también es un egoísta al que no le importan los demás.

Estoy harto de esta rutina, este empleo es insoportable nadie lo valora, invierto todo el día, y mi esfuerzo y nadie se da cuenta de mi vália, son unos desgraciados me tienen a sueldo de hambre y me explotan, estúpidos egoístas -estoy arto- ya quisiera irme a casa a descansar de tanta estupidez y egoísmo.

Maldito trafico por que no desaparecen todos y me dejan llegar a mi casa, -¡heey estúpido!-, -No te metas-, que no vez que llevo prisa, cállense me vuelven loco con tantos claxonazos, esperate no vez que no puedo avanzar, eres un imbécil, y este estúpido que no avanza.

No, no, dejame en paz tu también eres una egoísta como que quieres que este contigo, que no vez que estoy cansado, -solo piensas en ti-, eres igual a todo mundo solo quieres chuparme la sangre, eres insoportable.

¿Ayudarte con la tarea?, ese es tu problema, tu también eres egoísta no vez que estoy cansado, ni siquiera puedes hacer eso yo me mato para mantener a flote esta casa y tu ni siquiera puedes hacer una mugrosa tarea.

¿Qué? Un cuento, ¿como que un cuento? estoy yo para cuentos, -ya duérmete y dejame de estar molestando-, no puede ser que estés tan pequeño y ya estés aprendiendo a ser tan egoísta como todo el mundo.

EMILIO HERNANDEZ