Es posible que seamos nosotros seres humanos “inteligentes”,
depositarios del conocimiento,
del “que hacer” para sobrevivir en el planeta,
dueños de la tecnología militar para asesinar,
utilizando esquirlas para que la muerte sea dolorosa y cruel.
Es posible que nos estemos extinguiendo como raza,
como los dinosaurios con sus cerebros pequeños pero su huella grande,
ellos estaban ahí en ese momento de la historia cuando todo cambió,
¡que terrible coincidencia tenemos con los lagartos grandes!
ellos partieron del planeta,
una cálida mañana,
una mala señal para los Dioses que realizaron este experimento,
una configuración desastrosa en sus pruebas genéticas.
Es posible que también nos tengamos que ir de este planeta,
nuestra marca de destrucción y barbarie quedó registrada en el éter,
miles de especies destruidas,
más por la mano de la bestia más brutal sobre la tierra: el hombre,
que por los accidentes biológicos.
Nuestro ADN tiene poca diferencia con los gusanos,
posiblemente seamos como ellos,
vivamos complacidos en la mierda,
casi no la sentimos,
ni el olor de la muerte,
no sabemos escoger entre la vida y la muerte,
vagamos alegremente en este valle de lágrimas,
generando muerte y desolación,
mientras el planeta gira y gira.
Es posible que lancemos un grito de dolor,
como lo hicieron ellos,
vieron por última vez ese lugar tenebroso,
un sol radiante y rojo color escarlata,
se hundían lentamente en el fango del olvido histórico,
igualmente esta sociedad donde vivimos,
tiene enquistada la estructura de la muerte y el olvido,
como los dinosaurios
Solamente estamos en el lugar oportuno,
actuamos como ellos,
pero somos diferentes,
tenemos grandes cerebros pero una huella pequeña,
es posible que nos extingamos tan rápido como ellos,
nos arrastraremos para llegar a algún depósito de agua,
será difícil ese proceso de búsqueda,
nos trasladaremos en manadas como ellos lo hicieron en su tiempo,
y quedaremos depositados con nuestra tecnología y miseria,
el mundo futuro, alguna especie inteligente dirá: tenían grandes cerebros pero eran de huella pequeña.
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