Escenario: Una oficina sórdida. Mucho tráfico humano. Ruido de máquinas de escribir. Voces de fondo. Un escritorio, una silla. Muebles de kardex. Una ampolleta colgando del techo, da luz al escritorio.
PERSONAJES

Personaje 1 Es el Jefe de la oficina de un cuartel de inteligencia estatal en un país sudamericano cualquiera. Amargado de tanto papeleo.

Jeans 1 Esbirro mandado por el jefe de la oficina para hacer trabajos sucios.
Jeans 2 Otro esbirro
El Eléctrico Encargado de la parrilla eléctrica en donde torturaban a los pobres infelices que caían en sus manos.
El Técnico Psicólogo o con estudios de psicología. Era el encargado de quebrar la resistencia de los detenidos.

2 Profesores Detenidos por sospecha de ser de izquierda
1 Bien trajeado Detenido por sospecha, por si acaso
1 Desubicado Que estaba andando cerca del cuartel
1 La joven Personaje final de esta historia trunca. Era correo de los estudiantes que protestaban contra el régimen de facto, en las calles de la ciudad.

ESCENARIO UNO

Personaje 1 Sentado leyendo con cara de hastío, moviendo papeles. Entran por un costado 3 personas con sus manos atadas y con capuchas de bolsas plásticas negras para la basura. Cabizbajos, andando como a tropezones.. Seguidos por 5 figuras vestidas de jeans, quienes los insultan y les obligan a caminar más rápido.

Jeans 1 Aquí estan los pelotudos de la lista que nos dio Jefe. Este con pinta de tener dinero y muy bien vestido el huevón. Lo pillamos en la plaza de armas, muy de maletín James Bond el conchesum.....
Esta otra seguro que es una puta socialista o comunista. La agarramos en su casa. A la vieja de su madre la dejamos ahí, pero bien recomendada para que cerrara el hocico.

Jeans 2 Estos dos guatones son profesores lengua larga, con mucha palabrería Jefe.
Y este último lo trajimos por si acaso. Estaba vagando cerca del cuartel. Así que se fue de patadas en el traste y lo metimos en el lote.

Personaje 1 Con voz acostumbrada al mando. – Llévenselos a las piezas del fondo en el sótano: Nada de permisos para orinar ni para cagar. Mañana los interrogaremos. Dile al huevón del eléctrico que arregle los empalmes para la parrilla. Me tienen hasta la coronilla con que se saltan los fusibles. Ya andando.

Jeans 1 y Jeans 2 Salen arreando a los 5 encapuchados diciendo: - Ya..Ya.. Apurarse que no estamos en la playa.....Los empujan y salen.

Personaje 1 Tomando un papel y leyendo como en voz alta. Por la puta, recién estamos chequeando un barrio. No vamos a terminar nunca y la orden del jefe, es perentoria. Tengo plazo hasta este fin de mes. Tendré que tirar a la calle a todos los informantes. Se levanta y sale

ESCENARIO DOS

Una pieza sin ventanas. Una luz en el techo. Un catre metálico sin colchón. Amarrado al catre uno de los profesores, desnudo con la capucha en la cabeza. Temblaba, además de l frío de la habitación. Por el terror. Ese angustiante terror de no saber como se desenvolverán las próximas horas. Él muy despacio murmuraba como una oración diciendo: Que será de la Juana y de las gemelas. Él no era religioso pero, la palabra Dios se le escapaba de los labios.

El Eléctrico Así le decían. Otros le llamaban doctor, ya que posiblemente había cursado estudios de medicina. Este individuo se encargaba de los interrogados y de revivirlos cuando perdían la conciencia.
El Eléctrico Suavemente dijo: ya amigo, desembuche. Empecemos a hablar, no tengo tanto tiempo. Este se creía muy civilizado ya que no golpeaba a sus víctimas. Solo les ponía un poco de corriente eléctrica en las partes genitales en los hombres y en los senos en los pezones a las mujeres.
Se embelesaba con su trabajo. Decía que era una obra de arte.

La Víctima ¿Que quiere saber? y en un hilo de voz casi inteligible. Dígame que quiere. Pero no me ponga la corriente por favor

El Eléctrico Shiss. Si todavía no te pongo nada y ya estas rogando. Espera un poco para darle color. Y haciendo esto le aplica la “Picana Eléctrica” en los testículos. Ya hombre. Dame nombres, domicilios, lugares de trabajo.
¿Tienes casa propia? ¿Cómo se llama tu mujer?¿Tienes hijos? Desembucha todo. Tus reuniones en tu partido político. Ya. Ya hombre. Dame nombre y otra vez la picana eléctrica.

La Victima Gritando y saltando su cuerpo por efecto de la electricidad. Le va pasando la información a tropezones y entre lamentos y lágrimas le dice: No soy político. Solo enseño a los niños en una escuelita casi pobre. A los cuales quiero, ya que son muy pobres.

El Eléctrico No te creo nada. Aquí no vienen a parar los santitos. Te siguieron huevón y te fotografiaron ¿No quieres hablar? ¿No quieres contarlo todo? Mañana traeremos a tu mujer y a tus hijos y veremos que haremos con ellos.

En otra pieza Desnuda, con la consabida bolsa en la cabeza. La muchacha que no tendría más de 17 años, temblaba. Era muy bonita. Esperando la interrogaran.
Ella si estaba comprometida con las protestas y la lucha callejera. Era correo de los distintos grupos de estudiantes, que se manifestaban en las calle. Esos grupos que armaban un revuelo en una esquina, dejaban volantes y desaparecían para reaparecer en otro lugar. Se sentía una heroína y no temía las consecuencias. Así que estaba desafiante. La observaban el técnico y el eléctrico

El Técnico Hombre culto, refinado, joven, pues tenía tan solo 26 años. Le dijo a la joven tocándola con la punta de su dedo índice en el hombro: Mejor dime todo lo que sepas. Me temo que si no lo haces, lo vas a pasar muy mal y de esta saldrás mal parada.

La Joven: No les temo atado de maricas que se ensañan con el pueblo y con los estudiantes ¿Qué me van a hacer? ¿Matarme? No le temo a la muerte.

El Eléctrico: Ya mujer. Te podemos hacer cosas que ni te imaginas. ¿Conoces el palo? ¿O el potro? ¿Qué te parecería quedar colgada, atada de pies, manos y desnuda? ¿Qué crees que te pasará? Habla mejor y así terminamos con este asunto de tu retención. Eres muy joven y no sabes nada de estos lugares. Y diciendo esto le pellizcaba los pezones. La joven callaba con una mirada desafiante.

El Eléctrico: Como ella seguía resistiéndose , le encajó un tremendo golpe de puño en el estómago, dejándola sin respiración y ahogándose en sus propios vómitos. ¿Viste perra de mierda como ahora nos entendemos? Diciendo esto la agarro del cuello, la tendió en un catre metálico con somier del mismo material y sin colchón. Amarrándola con fuertes cuerdas y diciéndole con sorna: Ya amorcito, comienza a cantar, si no bajo esta palanquita, señalando a la pared donde había un interruptor de corriente.

La Joven Aterrada cerro los ojos y volteó el rostro para la pared. Se oyó un chasquido como de pequeños petardos y el cuerpo de la mujer saltó en extrañas contorciones y un grito infrahumano se escucho en los sótanos de la casa. Un coro de horrorizados lamentos se oyó a continuación. Eran los demás detenidos que lloraban de espanto.

El Eléctrico Dirigiéndose a la oficina del personaje 1, le dice: Jefe no logro despertarla. Se desmayo la maldita y ha pasado más de una hora.

El Personaje 1 Lo mira agriamente y le dice: Carajo de mierda. Te dije que empezaras a palabrearla primero. Pero el huevón tenía que cagarla. Llama al técnico, que algo de medicina sabe, y me diga que sucedió y si es posible reanimarla. Acuérdate que la tipa es correo de los izquierdistas y seguro que algo debe saber sobre los lugares donde se reúnen. Sale el eléctrico.

El Personaje 1 Diciendo: Mierda re mierda. Son todos un atado de huevotes. No piensan.

Vuelta a la escena donde se haya la muchacha. Está tendida desnuda sobre la parrilla metálica, mal llamada catre. Está inconsciente.

El Técnico Entrando revisa a la mujer y abriendo un maletín saca una jeringa y sin más trámite se la inyecta en la vena, sin alcohol ni desinfectante alguno.
Despierta la muchacha con ojos extraviados musita: Me duele la cabeza.
Mira niña, le dice el técnico.. Mejor confiesa todo lo que tienes que decir, porque entre mi amigo y yo te haremos mierda y después nos daremos un gusto contigo, ya que te violaremos. Bastante buenona se te ve y diciendo esto le pasa la mano por las piernas.

La Joven: Sucio y cobarde marica, le dice..No te daré en el gusto, así que hazlo si quieres.

El Técnico Sale al pasillo y llama a su compañero de fechorías. Oye ayúdame a colocar a esta hermosura en donde tu sabes y nos damos un banquetazo con la señorita.

La pieza sucia y mal alumbrada, con olor de orines y fecas de los supliciados. La niña llorando muy quedamente, temblando de miedo. Amarrada a una desvencijada silla, con los tipos al frente.

El Eléctrico ¿Hablaras, no? Confiesa de una vez por todas. Dinos quienes son tus contactos.

El Técnico Mirándolos con sorna. Esta no va a hablar ninguna cosa. O esta muerta de miedo, o la aleccionaron bien los malditos izquierdistas.

La Joven: Mátenme de una vez. No confesare nada y si me violan. De ustedes será la culpa. Háganlo si quieren.

En la actualidad ella ya es una mujer adulta y con una hijita producto de la bestialidad de esos tiempos.
Sigue existiendo, más no podemos decir que siga viviendo. Su alma y su mente murieron ese aciago día.

Lo dejo para que todos ustedes imaginen la miseria, el dolor, la angustia y la maldad. Todo eso encerrado en un paisito de sudamerica. Bien pudiera ser el mío

Nomade...La mujer me conto esa historia y mirando su rostro la doy por cierta...En sus ojos no había vida