OVNI ELOY
Ahora que estamos en el año 2048, y que se desclasificó la información secreta sobre el fenómeno ovni en todo el mundo, me atrevo a contar la impactante experiencia que me pasó en el mes de septiembre, hace cuarenta años atrás, cuando me encontraba junto a mi novia frente al río Calle-Calle de la ciudad de Valdivia, a las tres de una templada madrugada en la costanera, sentados acariciándonos amorosa y apasionadamente en uno de los bancos, totalmente ajenos al resto del mundo, cuando siento que alguien desde atrás posa sobre mi hombro izquierdo una mano helada, y mi amada siente lo mismo pero en su hombro derecho. Al girar a media nuestras cabezas nos encontramos efectivamente con que tenemos sobre nuestros hombros una mano verde enguantada, cuyo dueño creemos que es un carabinero, que nos toca para llamarnos la atención porque nos hemos excedido en nuestras caricias. Pero al darnos completamente vuelta nos hallamos con la impactante sorpresa, de vernos frente a frente, nada más y nada menos que ante un extraterrestre, con las características ya conocidas, grandes e imperturbables ojos negros en una gran cabeza ovalada. El miedo fue tan tremendo que aunque todavía nos da vergüenza decirlo, nos hicimos de todo. El extraterrestre se comunica de inmediato telepáticamente y nos dice que debemos acompañarlo a la nave que nos está esperando frente a nosotros, pero antes nos ordena que nos lavemos en el río, incluída nuestra ropa, porque con el olor que emanábamos podíamos asfixiar a toda la tripulación.
Luego nos subimos a la nave por una rampa, y en su interior nos esperan otros dos extraterrestres más que nos hacen pasar a un pabellón médico. Nos ordenan quitarnos toda la ropa y nos comunican que nos harán un profundo examen, porque desde hace mucho tiempo en su gira por el universo no se encontraban con seres tan subdesarrollados y aromáticos. Les llama la atención nuestra anatomía, especialmente nuestras partes más íntimas, debido a que ellos carecen totalmente de vellos, no tienen sexo y se reproducen solo por gestación invitro en vientre artificial o por duplicación genética en laboratorio. Se ríen, de manera alienígena, porque encuentran ridículo nuestra forma de concebir. Después nos pasan nuestra ropa seca y limpia, no vestimos y nos llevan a un centro psicológico-lingüístico, donde nos hacen hablar y cantar. Debido a que yo tengo pésima voz, me hacen callar de inmediato, comentando lo desagradable de mi registro, no así a mi novia que la tienen por un buen rato cantando regetón, que acompañan con movimientos de caderas y de hombros. Luego se dedican a auscultar nuestro líbido, con instrumentos desconocidos que colocan sobre nuestra cabeza, comentando cómo todavía nuestro cerebro reptilíneo primitivo está vigente y tiene tanta fuerza en nuestro comportamiento, que nos hace ser excesivamente agresivos y libidinosos, lo que les llama poderosamente la atención debido a que en ellos no existe desde hace millones de años el cerebro antiguo y sólo poseen por su gran evolución un poderoso neocorte, con facultades de clarividencia; telepatía, con capacidad de comunicarse de esta manera con otros seres inteligentes de otras dimensiones, o por viaje astral, modificar su futuro a voluntad, valorando como principal bien espiritual, el amor al prójimo, que no sólo lo sienten y lo estudian en los Centros de Estudios Superiores, sino que lo más importante, lo practican, siendo por tanto una de las civilización más felices del cosmo.
Como según los alienígenas nuestro comportamiento como pareja ha sido ejemplar, a pesar de nuestro estado primitivo, nos invitan a dar un paseo por el cosmos, recorriendo todo nuestro sistema solar y otros sistemas solares instalados en otras galaxias, permitiéndonos ver desde la nave, y desde la distancia, a través de poderosísimos lentes, diferentes tipos de vida, algunas mucho más avanzadas y otras más primitivas que nosotros en una etapa evolutiva inferior, pero que según nos comentan nunca tan fétidos, porque han quedado muy impresionados con la experiencia de la costanera.
Finalmente nos devuelven al mismo lugar, el que está totalmente cambiado, porque desde que salimos de la Tierra en el mes de septiembre del año 2008, han pasado aquí en nuestro planeta cuarenta años, que en la nave solo fueron horas, por la velocidad de la luz con que se desplaza.
Nos llama poderosamente la atención ver a todos nuestros parientes y vecinos, que aún viven, estén justamente cuarenta años más viejos. La ciudad de Valdivia, ya no es la misma; hay mucho edificio de tres a cinco pisos; está instalado y en funcionamiento el puente Cau-Cau y el paso Huaúm con una moderna conexión y carretera de cuatro pistas; la costanera llega hasta Antilhue; funciona un tren solar última generación, desde Santiago a Puerto Montt; en Avenida René Schneider con Francia, detrás de una hermosa Iglesia que reemplazó a la antigua allí existente, ahora oficiada por monjas que pueden hacer misa de acuerdo a los cambios del último cónclave, existe un parque exclusivo para accionistas y ejecutivos de alto rango de megaempresas, que tiene multicanchas techadas de básquetbol, de baby fútbol, de tenis, etc., piscina temperada o no, que cambia automáticamente según la temperatura ambiente, además restoranes carísimos con especialidades en comida italiana, mexicana, chilena, etc., parque embellecido por los mejores paisajistas en flora natural y plástica; más allá está la Avenida de los Pobres como se le llama, cuyo humedal se ha podido conservar a medias, sacando agua de pozos profundos, también hay instalados unos pocos puestos de comida chatarra, asientos de cemento bien empotrados, rodeados de árboles y flores confeccionados en metal, no quedando ya los de cobre; al lado del puente Calle-Calle hay una playa popular con arena traída de los campos desérticos, que en su tiempo fueron agrícolas; en Corral existe una fábrica de pastillas de calcio destinada a la gran cantidad de enfermos a los huesos, porque ya prácticamente no se produce la leche natural, materia prima de las pastillas que se saca de las escasas conchas de moluscos que todavía quedan, complementada y aumentada con uñas de los pocos pescadores y mariscadores existentes, que se pagan a muy buen precio, por contener además Omega 3; el Casino de juego ya ha enriquecido a unos pocos jugadores y a muchos ha dejado en la ruina. Cumpliéndose todos los pronósticos negativos de la época cuando nos ausentamos: han disminuído dramáticamente las reservas de agua potable y de bosque nativo; la energía se obtiene del sol, porque el clima ha cambiado radicalmente, y ya no hay hidroeléctricas, no porque sabiamente por respeto a la naturaleza y a todos los seres vivos allí existentes se haya decido así, sino porque precisamente no existe suficiente agua para hacer funcionar las represas; alimentándose no sólo Valdivia, sino que todo el mundo, de preferencia de grageas que contienen todas las vitaminas, proteínas y demás elementos indispensables para la vida humana, porque por el cambio climático ya casi no se produce naturalmente y el pescado y marisco o está contaminado o ha sido exterminado por su sobreexplotación, y/o por el aumento de la temperatura de los océanos. Sin embargo Valdivia sigue siendo un lugar turístico, debido a que llega mucha gente extranjera a ver los deshielos de los volcanes de la zona, que caen en pedazos rodando en forma impresionante, impactando tanto en lo visual como en lo auditivo por el ruido de muerte y de agonía que producen la caída de los grandes bloques de hielo.
Nos llama la atención que a pesar de este panorama, las personas de la ciudad y del mundo no se ven agresivas, tristes o resignadas, sino que tranquilas, como si no tuvieran problemas, lo que rápidamente nos informamos se debe a que todos ingieren tranquilizantes, anuladores además del pensamiento reflexivo y crítico, de la dignidad y voluntad de lucha por nobles ideales, grageas entregadas gratuitamente por los gobiernos capitalistas de turno y/o practican yoga en grandes espacios públicos, dirigidos por los maestros antiguos que se materializan sin que ya esto sea novedad, maestros que son pagados por las transnacionales para mantener el orden y la paz universal.
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