POR: GENARO ARENA RAMIREZ(GENARERAM)

“DOS COMPAÑÍA, TRES MULTITUD”

Aconteció que en una ciudad tan linda, se tropezaron un mercader y un peregrino....! Este ultimo, un viejo en avanzada edad madura, que pasaba por este punto tan remoto del mundo...!

Poseía una inmensa experiencia y contaba sus relatos de aventuras, escondiendo en lo mas hondo de su ser, una gran sabiduría, siempre se acercaba a esos corazones solitarios, puros e inocentes; con una sinceridad y necesidad de evolucionar en la grandeza de su alma.

Quizás recordaba el mercado, donde observaba una gran actividad comercial; para conocer bien a los lugareños.

Estando parado a los tarantines de comida y disfrutando de un té de la China, llego un mercader a comer y tomar algo refrescante. Cruzaron saludos y miradas, así comenzó una gran amistad que hizo compartieran siempre todo.

Pero un día, vino de visita y se quedo el hermano mayor del mercader; avía estado encarcelado y buscaba abrigo, techo y comida de su hermano menor .
Lo que a continuación relato yo: “EL PEREGRINO” es lo que no le deseo suceda a nadie en el mundo.

- ... “ Este hombre lleno de resentimientos, odios, discordia, intrigas y egoísmos maliciosos, se encargo de realizar una confabulación, llena de calumnias a espaldas del viajero.

Buscando por celos destruir nuestra amistad, nos llevo a enfrentarnos de tal manera y sin razones hasta que el mercader odiara definitivamente al peregrino. Por años le faltaba el hermano menor con improperios y vituperios de su ultimo amigo verdadero, pues de éste aprendió muchas cosas que le dio uso y prosperidad.

Pero llego el momento en que se convertiría en un malagradecido con su conducta impropia manipulada por su hermano mayor. Aquel hombre ya de mal corazón no le basto con perjudicar la confianza y llevo al desprecio de todos los habitantes del lugar, al peregrino. La justicia cobro su parte muriendo el hermano mayor del mercader en un fatal accidente producido por un descuido suyo y el mercader injustamente culpo al peregrino de semejante atrocidad, siendo por supuesto inocente aquel gran amigo.

Pasado un tiempo el mercader se le endureció el corazón olvidando sus virtudes y dones adquiridos por su amigo y se dio a la tarea de buscar todas las artes y el dominio de las magias de su tiempo, causando daños y dolores, llanto y sufrimiento a sus prójimos para practicar y tratar de vengarse vilmente del peregrino persiguiéndole cada vez que recordaba su difunto hermano.

Por su parte, El Peregrino, en esa cosas de la vida, conocía en sus múltiples viajes por el mundo, muchas formas de repeler, deshacer y protegerse de las maldades y acciones de hombres malos en especial con las pretensiones del mercader.

Así que aun, en estos tiempos ya ancianos siguen con esta lucha sin sentido y atroz; con siglos y siglos de luchas, como iones de vidas pasadas, al parecer por un gran karma hasta el final total de ambos...- “

MORALEJA: “ A veces el empeño afanado de una obsesión sin ir mas allá de nuestra nariz hace que erremos y nos aleje de toda verdad y reflexión no habiendo la sutil conciencia para la liberación de nuestra alma egóica”

FIN