Caminos negros se trazan
Desde mis ojos a través de mis mejillas.
Manchando mi blanca almohada
De aquel vano color.

Creo ver el mar.
Un océano de penas
Que de mi alma brota sin parar.
Ante la cruel realidad de tenerte solo en mis recuerdos.

Me ahogo, no puedo respirar
Siento la vida querer marcharse
De este putrefacto cuerpo pecador…

No hago lo suficiente para ganarme la paz….
Solo lo necesario para sufrir eternamente…

Quiero dormir
Y nunca despertar
Y soñar todos los días con tu sonrisa.

Mi corazón se siente atravesado
Por mil agujas con tu nombre...

Déjame morir…
Unirme a la infinita y bella oscuridad.
Ser el viento de la noche.
Para poder rozar tus cabellos.
Tu rostro al dormir,
Y tu cuerpo acompañado por aquella mujer.

Mírame tiernamente por última vez.
Dime esas hermosas palabras
Que de tu boca salen para enamorarme…

Marcharme será lo mejor
Aunque el dolor de mi alma
No me permita existir en paz
Habitare en tus recuerdos
Me fundiré en tus palabras
Y seré tu aire fresco en días de calor

Un ángel con las alas negras
Manchadas en pecado soy

Seria bueno que me olvides
Y aprendas a vivir…
Mientras tanto mis mejillas tatuadas
En negro color me recordaran
Que nunca tuve la oportunidad de ser feliz…
Que todo fue un sueño
De principio a fin.