un poema
interminable
para decir,
para pensar,
para soñar,
mientras muero
de cansancio.
pasa que nunca
tengo nada que decir,
aún así,
escribo demasiado.
me aburro de vivir
tanto
me aburro de tener siempre
-nunca-
la razón,
me aburro de que la gente me diga
que yo no juego
porque perderían siempre,
no me gusta que me digan perfecto
-y me gusta tanto-,
no me gusta que me consideren inteligente
-me encanta-
porque sé
que es mentira.
ni que me digan insensible
-es tan interesante-
porque es falso
-aunque nadie me crea-
a veces me dicen
que tengo un corazón extraño,
-justo lo que escondo-
que tengo un corazón oscuro.
no se equivocan,
sí
me entretengo al ver sufrir a la gente
me da tanta risa
-y tantas ganas de matarlos
llorones-
la risa la escondo claro,
que van a pensar de mí?
en este mundo la gente tiene que usar máscaras
supongo
que podría ser un asesino en serie
ya lo he pensado
la otra mitad de mi corazón oscuro
-ahí donde pega el sol-
dice que nadie tiene la culpa
-yo tampoco-
así que
qué se le va a hacer...
entonces
un bosque
bosquebosque
que dice que tiene frío
es azul
-todo es azul
porque es lo contrario del puto naranjo grisáceo-
pasa que el bosque
tan lindo
tan azul
tan de ensueño
tan...
se perdió
entre las enredaderas negras
que lo cubrieron
es verdad
no sé qué espero
si lo supiera
-alguien normal, o valiente,
diría que iría a buscarlo-
yo sólo sería feliz por saberlo,
podría morir en paz
antes le decía
pieza del rompecabezas
(puta-pieza-del-asqueroso-rompecabezas-que-eres-tú)
pero ahora no le digo nada
no tengo nada
no desprecio nada
no tengo nada que decir
una sonrisa triste,
una de esas extrañas en mí,
-una de verdad-
es la que tengo ahora.
pero nadie
sonríe para mí
-será que les doy miedo-
sonríe para mí?
-mi otra mitad se adueñó de mis manos
la mitad que pide ayuda encubierta-
sonríe, para sonreír contigo
-una de esas sonrisas de verdad, por favor,
las otras, me sobran-
hablo a quien quiera oírme
hablo por hablar,
porque a nadie le gustan los llorones,
-aunque nunca lloro-
a mí tampoco
tengo la soledad metida en el alma
-como diría pilar ternera-
aún así, la vida no me debe nada,
yo le debo a la vida,
por fin lo sé
por eso no lloro
no tengo derecho a hacerlo,
como no tengo derecho
alguien se tomó la libertad
de llevarse mis lágrimas
lejos,
muy lejos
-al bosque que se perdió
disfrazado de enredadera-
para que no pudiera encontrarlas
-sino que ellas a mí
debo caerle mal a mis lágrimas
que no quieren encontrarme-
entonces
los violines
aúllan para mí
y los aplausos
repercuten para alguien más,
no me importa demasiado
así
pasa el tiempo
para los miserables
de a poco
sufriendo
gota a gota
del reloj de arena
roto
todos morimos
de a poco
pero unos mueren
más rápido que otros
yo no sé si lo hago rápido o lento,
siendo joven me siento viejo
-debe ser rápido-
pero el tiempo pasa
lento, lento lento
una sonrisa amarga
-de esas comunes en mí-
es la que tengo ahora
a veces la gente no entiende
que lo que a uno le preocupa
no es el futuro,
que lo que uno quiere
no es el futuro,
sino
un ahora,
un ahora para recordar,
un ahora que en un futuro
sea un pasado,
y no una fecha indeterminada
porque
podría vivir mi vida en las calles,
pero vivirla.
no encerrado
en mi hogareña celda de madera,
fingiendo vivir
una vida que no existe
-que no existe
porque
no la recuerdo-
la vida está hecha de recuerdos
eso dije hace tiempo
-no tanto-
pero yo no tengo,
porque al evocar el pasado
sólo siento un corazón oprimido
-miedo-
sólo busco algo de qué aferrarme
-soledad-
sólo quiero un poco de fuego
-frío
de todos los tipos que existen-
amo y odio
a esa gente
que cree entenderme
que quiere entenderme,
que no entiende
que nunca lograrán hacerlo
porque ni yo puedo
amo y odio
a esas estrellas
que no logran iluminar mis noches,
esa brisa
que no logra hacerme temblar,
ni que me trae los aromas
que no recuerdo
porque algo tienen que significar
-lo hacen-
lo bueno es que no son recuerdos
son sólo un par de sensaciones más
-y menos-
porque algo tiene que significar
ese naranjo grisáceo
ese gris anaranjado
que ilumina tan bien
y tan mal
porque algo tiene que significar
un bosque azul
-todo es azul-
una enredadera negra
-espinas-
un corazón
con dos partes distintas
-o dos partes distintas
con un solo corazón-
porque la vida no puede ser recuerdos
porque el mundo no puede ser
como yo pienso
porque deben tener razón al creerme frío
y deben tener razón al tenerme miedo
porque soy todo lo que no quiero ser
-y me gusta tanto-
porque
por qué
no lo sé
es el piano ahora
el que me habla
que me dice
que se fue
y lo despide
con un silencioso réquiem
de armónicas extranjeras
-que no logra escuchar
o que no quiere entender-
mis pasos inaudibles
se cansaron
de serlo
mi boca
inaudible
se cansa
de callar
mis manos
inaudibles
intocables
inestables
insidiosas
piden una vez más
algo que no les van a dar
voz
mis pasos quieren llegar
más allá de donde llegan
-a donde puedan correr-
mis ojos quieren ver
más allá de lo que ven
-demasiado-
mis manos quieren
poder tocar
sin que digan
que hieren
-mis lágrimas se niegan a salir del bosque-
y la canción melancólica
habla de cocinas
de abrazos
de armas
que no logro comprender
-muero de cansancio-
mis dedos mueren de hipotermia
-sin algo-
mi boca de inanición
-sin nadie-
mis venas de deshidratación
-sin nada-
que beber
así que
buscaré
una pistola
y una espada
un hermano gemelo que quiera matarme
-mira tú qué cosas,
ya tengo-
y algo/alguien para matar
hoy
soy unknown
hoy
soy nobody
hoy
soy nothing
soy un desconocido sin cuerpo sin nada
que no viene de ninguna parte
que no recuerda más que sensaciones asustadas
que no quiere nada más que el vacío
que tan bien le hace
que tan bien nos hace a todos nosotros
-a todos mis gemelos que quieren matarme-
por eso
se acaba
sin principio ni final
algo
sin sentido ni propósito
-más que el de matar mi tiempo
que ya viene muerto de nacimiento-
ahora pienso
que todos morimos poco a poco
pero que yo
muero más lento que los otros
y
quizás la pieza
-puta
pieza-
del rompecabezas
-asqueroso
rompecabezas-
no es nadie
no es nada
no se
sabe
si
soy
yo
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.
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