Un ramillete de flores para la novia!!!
"Que sean negras, que sean negras!!".
Negras como la luna escondida
entre las nubes de hiedra.
Negras como la vela de Ulises,
que entre tinta y papel,
amargas penas alberga.
Negra como los ojos de la amazona,
que no busca sino su camino
y tambien con negra sangre lo entierra.

Que sean negras esas flores
pues la novia no quiere verlas.
Le aterran, las busca, las acecha y las niega
y con gran pesar en su corazón
por su amado solitario, que es la muerte,
se lamenta.

Flores negras, flores marchitas para la novia,
de quien su reflejo derritiió el espejo,
y ahora no es más que una mancha borrosa
en el cristal, en la losa
en la que su esposo escribe un requiem hacia quien va a acariciar.

Ya no sois dueños de vuestro corazón.
Vuestro corazón voló a tierras lejanas
sin dios y sin razón
y allí permanecerá guiandose por su inquietud y no por el deber.
Solo por amor y pálpitos de dolor.

Un oscuro ramillete de rosas muertas y difuntas
pues el alma de la novia, su corazón, ya voló.