Iconos de glamour,
Mujeres de refinamiento muy especial.
Algunas de las elegidas por la pasarela.
Algunas elegidas por esa belleza tan sutil.

¡Capitán!
¡Qué!
Mi madre se muere.
¿Qué quieres que haga hijo?
Que me de libre, capitán
No puedo hijo,
No debo.
Es que si no la veo hoy, mañana será tarde.
¡Hijo! ¡Eres un soldado!

Entonces Daniela tenía 19 años,
Su metro ochenta y cuatro y sus senos perfectos nunca imaginaron más que noches de placer.
Su paso sensual dentro y fuera de la pasarela, dejaba a más de un hombre sin noción de tiempo, ni espacio.
Daniela, la bella…

Capitán, mi mamá tiene enfermedad grave.
¿Qué tiene hijo?
Se la han llevado, capitán.
¿Cómo?
Si, capitán, su cuerpo esta blanco y lleno de manchas…ella no era así.
OK, hijo, vete a verla.
Gracias capitán.

Daniela, comenzó su vida rápida,
Las citas con los hombres más famosos de Francia,
La Riviera,
Los primeros orgasmos con sabor a cocaína y brandy.
Los mejores atardeceres de cualquier chica de cualquier edad.

Capitán,
Sí
Lo llamo para decirle que mamá a fallecido.
Lamento hijo…mucho.
Aquí capitán todos nos vamos pronto, todos.
¿Qué edad tenía tú mama?
Treinta y cinco, capitán.
¡Treinta y cinco!, ¡y tú 19!

Daniela llego a los 20 con la blancura y delgadez de una verdadero modelo de haute couture,
La que no llegó a los veinte fue su alma.
Su alma se fue con su nariz, con su modo de vida.
Ella se fue pronto.

Capitán.
¿Qué hijo?
No sé que fecha ni que día estoy viviendo.
OK, hijo no tienes noción de tiempo ni espacio…
Es normal aquí…tranquilo.
Capitán, extraño la voz de mi madre, su metro cincuenta, sus ojos negros, sus manitos. Sus caricias…
Es normal hijo, la quieres.

Daniela se apagó el mismo día que la mama de José, mi soldado, le dijo cuida a tus hermanos hijo mío.
Daniela nunca tuvo tiempo de conocer a sus hermanos.
La madre de Daniela tiene 65 años, pero se la ve muy bien.


La mamá de Daniela, la mamá de José.
Daniela se fue entre noches blancas y caras.
La mama de José, entre noches negras, oscuras y pobres.

Así es.
Así seguirá siendo.
Mi vuelo a Paris es dentro de 10 minutos.
No iré, José se merece un minuto de respeto. Respeto que nadie se detuvo a pensarle siquiera.
Respeto que Daniela hubiera cambiado por todos los gramos que consumió, por todos los besos falsos que no negó.

Pienso, que estupidez la nuestra…
Perder la noción del tiempo y del espacio.
Perder, la noción.
Perder, el tiempo.
Perder el espacio.