Préstame un día Mi Dios Querido me partes en cicatrices casi por doquier. Pregunto en lares alejados tu pregón es de seda ojal. ¿Oraciones para la lucha o escarnio? Cieno raso cubrirá al neo arisco Con valores lo veras sin temor a los montes ir Jóvenes marchando sobre el mismo paral jóvenes cayendo y cubiertos por la misma Regálame un día Mi Dios sin alegarme tranquílame en cicatrices como si fueras quina termal.
Texto agregado el 01-05-2008, y leído por 131 visitantes. (1 voto)