saqué la mejor nota de la humanidad
miré la tarde en total soledad y comunión con mi alma
corrí muy temprano y vi el despertar del alba
saludé a todas las aves del cielo y los perros ladraron, moviendo su cola
vi a un hombre, una mujer, niños, gente...
saludé a todos con una abierta sonrisa
fui feliz
cantando en silencio
el milagro de estar vivo, hoy...

pasaron los años
pasaron muchas vidas
y ahora en mi último lecho
aún sonrío a toda la gente que recuerdo
porque aún viven en mí...
he abierto los brazos
y con un llanto de amor
he dicho adiós a la vida...

un sonido fuera de todo espacio y tiempo
arrulló como una gota
el resto de mi alma
y fui feliz
por el resto de la eternidad...


san isidro, abril del 2008