Atardece ya en el bosque, y el sol ya parece esconderse para dar paso a la noche.

El búho observa y reflexiona, con sus ojos grandes y profundos el acontecer diario del bosque.

En aquel bosque, además de las labores diarias, como quienes sustentan el alimento, el abrigo, y la seguridad contra seres hostiles al bosque, existe también un grupo de animales, que alegran la vida en el bosque. Unos cuentan historias, como los trovadores antiguos, otros amenizan la velada con bella música, algunos bailan, y otros realizan bellas esculturas que asombran a la gente.

Un buen día, cae un paquete desde el cielo, con extraños colores, y un lenguaje indescifrable para los animales del bosque. Los venados, fueron los primeros en encontrarlo, y en un arranque de curiosidad probaron uno de los tantos paquetes misteriosos caídos del cielo, ya que su olor lo hacía irresistible.

El consejo de ancianos del bosque, decidió realizar una competencia dentro de los integrantes del bosque, para ver, quien se haría merecedor de aquellos extraños pero apetitosos paquetes.

Todos comentaban acerca de quien lograría ser el ganador de aquella competencia.

El oso, visitando a su amigo el búho, le pregunta

-Amigo, se que muchos participarán, pero solo pocos quedarán seleccionados para ser el merecedor de aquellos paquetes, y la verdad no se si tenga aquello especial, que tienen los animales que alegran a la gente, y que le dan eso mágico a nuestro bosque

El búho le responde

-Amigo oso, veo que reflexionas profundamente, y realmente te preguntas si serás seleccionado, si conmoverás a nuestro bosque. Y creo, que debes honestamente responderte aquella pregunta

Ya en el día del concurso, y con los animales presentándose, observamos al oso reflexionando, a la sombra del árbol, mirando hacia el horizonte. Se para, y va hacia el lugar establecido para el concurso.

Allí encuentra al jurado, y mas observa también a los demás animales que han concurrido.

Comienza a leer su historia, con algo de nervios, una gota de sudor comienza a caer desde su frente. Sin embargo, mientras sigue leyendo los bullicios se comienzan a hacer mas y más imperceptibles.

Una vez terminado, observa los rostros impávidos del jurado, mientras escucha algunos aplausos de los animales presentes.

Uno de los miembros del jurado, lo observa detenidamente, y le dice

-Amigo oso, por qué no habías venido antes?. Tu relato es de lo mejor que he escuchado hoy. Quedas seleccionado.

El oso se va, y parece que todas las dudas se despejan, y una gran energía parece embargarlo. Va a ver a su amigo búho, quien lo observa, sin decir palabras

Pasan los días, y los animales a medida que van siendo seleccionados, van presentando nuevamente sus creaciones para dilucidar quien será el ganador. El oso, quien ya va con mas confianza a medida que es uno de los escogidos para seguir en carrera, observa una tigresa blanca, quien parece gozar con el concurso y sus obras.

El oso, se encuentra nervioso, pues los seleccionados se reducen a un pequeño grupo dentro de los cuáles saldrá el ganador. Dentro de ellos, está el lobo, quien ha sido uno de los trovadores mas admirados del bosque, y también se encuentra disputando el anhelado premio. Sin embargo, el oso recuerda cuando alguna vez eran amigos con el lobo, el ciervo, la jirafa y el pato, quienes forman parte de los animales que brindan magia al bosque. Sin embargo aquella triste pelea, los alejaría y transformaría en casi perfectos desconocidos.

Ante aquellas cavilaciones, el búho, acercándose al oso le pregunta

-Amigo oso, dime...que es en verdad lo que quieres? Quieres ganar el concurso, para así poder saborear aquellos extraños y esquisitos manjares? Deseas conquistar a aquella tigresa blanca que ha vuelto a darte alegría, o quieres en realidad otra cosa?

Aquella tarde fue para el oso, casi interminable a la espera de los resultados

Ya al atardecer, el grupo de ancianos entregó su veredicto

-Ya tenemos el nombre del ganador. El ganador es...la avestruz

El oso, escuchó atónito el veredicto. Comenzó a palidecer, y se retiró una vez mas hacia su árbol de meditación. Mientras miraba hacia el suelo, apareció el búho

-Amigo oso, no te culpes, ni te martirices. Sabes bien que la avestruz ha sido una justa ganadora.

-Pero, retrucó el oso, yo pensé, luego de escuchar, el beneplácito del jurado, y la alegría de la gente, que sería el ganador!

-Y si te digo, que me has dado un momento mágico, no solo a mi, sino a otros animales

Aquella voz, aquella extraña voz, aceleró el corazón del oso bonachón. Es...acaso podría ser...su amiga la mona?

El oso, no pudo contener su alegría, y se fundió en un abrazo eterno, con aquella amiga, que no volvió a ver luego de un largo tiempo, después de su pelea con los animales que animaban las tardes del bosque.

-Mona has vuelto! No pensé que lo harías, luego de que te fuiste trepando por los árboles, junto al ciervo y al pato

-La pelea que tuviste con nosotros fue dolorosa, y yo sufrí mucho. Las esculturas que yo hacía en el bosque, siempre serán importantes para mí. Pero también necesitaba poder desarrollar mi pasión, poder desarrollarme todo lo que pudiese. Y eso solo lo podría hacer en el bosque de drakonar, el cual posee un museo, una experiencia que no podía dejar pasar

-Y dime, por qué has vuelto?

-Porque ya realicé lo que sentía en el museo del bosque de drakonar, y me realicé como escultora. Junto a mi amigo pato, hemos visitado muchos bosques para poder realizar un nuevo y mejorado lugar de espacimiento, donde afloren las historias, la música, así como también construir entre todos nosotros un museo. Y decidimos venir a visitar este bosque que nos vio nacer, que es parte de nuestras raíces, y he observado el concurso. Me siento orgullosa de tí oso, has entregado un relato maravilloso, el cual ha encandilado a madres, hijos, abuelas, a muchos en este bosque

En ese instante el búho le dice

-Amigo oso, quizás ahora has comprendido lo que realmente querías. Quizás no era ganar aquellos manjares de otros lugares que ni siquiera conocemos, ni tampoco conquistar a aquella tigresa blanca, sino conocerte a ti mismo, y darte cuenta, que siempre has formado parte de los animales que nos brindan esa magia especial a todos nosotros. Espero que ahora sepas lo que debes hacer

-Sí amigo búho, acompañaré a la mona, al pato, hablaremos con el lobo, la avestruz y los animales jóvenes que quieran participar, para darle momentos inolvidables de magia a este hermoso bosque