Es fuego en cambio de aire, algo cambia mi aliento
Intento caminar un poco más, no necesariamente con éxito
Es algo difícil de lograr cuando hay
Un poco más de tres cabezas peleando por el espacio de una, la mía
Al levantar la mirada solo veo algo, tu largo y brillante cabello
Mirada hiriente con sonrisa llena de expectativa
Disfrutando mi dolor así como el viento con tu falda
¿Qué me has hecho? ¿Por qué mi malestar es tu risa?
En tus manos reside la prueba
Prueba que nadie ha de ver
Por más que te esfuerces en no esconderla
Ya comprendo mi desenlace y acepto mi final.

Pero tu risa, actitud y firmeza
Explica el porque en serio quise algo contigo
Ahora de alguien que quería algo en serio
Paso a ser un juego, un juguete agonizante
Homologo a los insectos que quemamos en la hoguera
Entré a algo lo cual no quería desenlace
Y tú me escondiste las reglas
Para que yo jugara a tu manera
Torpe, ciego, y esperando tú guía
Con ansiedad incontrolable y espíritu maleable
Voluntad dúctil y simple, siempre con problemas
No me arrepiento de haber pasado
De un lado a otro de tu anatomía maléfica
Me has llevado por un mundo oscuro
El cual la única salida solo tú la conoces
Donde uno, el sujeto, es lo suficientemente terco
Para negarlo mediante la búsqueda de otra alternativa.

El último paso, sin alternativa
La fuerza ya le pertenece al aire y a la transpiración
Perdidas en el entorno espeso de mi última morada
Alma torpe e ilusionada en la belleza de enfrente
Que ahora se regocija de terminar la vida de este personaje
Que deja de respirar para no sentir aquella presión en su pecho
“Eres un demonio de pelo largo y falda corta
Pero debo admitir, el estar contigo, no lo evitaría”