A este conchadesumadre
los canales que saltaba
las mañanas antes libres
le tragaron los zapatos,
ya los dedos son aletas
y en el mar se desenvuelve
con soltura peregrina,
con dulzura venidera
Y a olvidar la tierra.

A este hijo de la puta
le han dormido los pulmones
una eternidad, un siglo,
un puñado de derrota
y en la costa desmembrada
respirando mar caliente,
abotona a su chaqueta
el aliento de las orcas.
Y a olvidar la tierra

A esta bolsa de pellejo
le entumecen las palabras
llora versos en burbujas,
se tatúa en las pestañas
el reverso de un destierro,
el idioma de las algas
y la noche es lo profundo
y la claridad salada.
Y a olvidar la tierra

A esta bestia malparida
las selvas, las estepas
le atormentan, cuales perros
que le aúllan a las sombras.
En la carga surte miedo
y en la huída los corales
acarician sus oídos,
susurrando lo anquilosan.
Y a olvidar la tierra

A esta mierda asomagada
la expresión de tos funesta,
le han corrido de la cara
navegándola en corrientes.
Quebrando las exclusas
bien platinó la carne,
sumergido en arrecifes
sus escamas resplandecen
Y a olvidar la tierra

A este sacohuevas
el aire le percude,
en su boca es como fuego,
en sus ojos negra nube,
desde el fondo del abismo
maldiciendo arreboles
compadece a cormoranes
y a los peces voladores
Y a olvidar la tierra