Mientras espero que vuelvas,
Te sueño.
Mientras espero que regreses,
Te pienso.
En calma,
Con seguridad.
Contemplativo,
Viendo el tiempo pasar como hojarasca otoñal.

Mientras espero que vuelvas,
Te sueño.
Mientras espero que regreses
Te olvido.

Y tu mirada, ya no es la misma.
Y tus ojos no brillan,
Y tus palabras ya no abrazan como antes.
Y tus verdades, son mentiras en el tiempo.

Tiempo del olvido…
Tiempo enfermo de egoísmo
Tiempo que lastimaste tú.
Tiempo que dañaste tú.

Mientras espero que vuelvas,
Mi hijo, juega.
Mientras espero que regreses.
Nuestro hijo, crece.
Se hace hombre,
Aprende.
Vive.
Ama.
Sueña.
Pero ese sueño, no es el mío,
El no sueña tu regreso.
El sueña su propio sueño,
Que de dolor tú le llenaste.
Por suerte ya no te sueña, ni te soñará.

Sabes, mientras espero que vuelvas,
Disfruto callado, solo, el momento
De tu regreso.
El momento.
Ese mismo punto ínfimo…
El mismo puntito, solitario, que dejaste morir.
Ese mismo punto de tinta muerta que le dejaste de regalo a tu hijo.

Mientras espero que regreses.