Con la fuerza del mar que llega a mis oídos
esta noche de estrellas mi alma te ansía,
buscando entre los besos olvidados
dulzuras que suavicen la distancia.
Recordando tu rostro cierro los ojos para verte,
Suspiras...
a pesar de todo, también me evocas a solas;
luego cuando amanezca, con el sol del oriente
envíame ese suspiro cautivo, sobre las olas.