Yo me he consagrado
A la tarea de aprender
Me levanto leyendo
Y me acuesto leyendo.

Creo que llevo una vida más intelectual
Que muchos de los que ocupan
Sillones parlamentarios.

Y que he recibido a cambio?
Nada!

Sólo boletas
Y letras de cobranza,
Romperme la espalda haciendo mezcla
Y levantando planchas en la contru.

Pienso que merezco algo
Mucho más sublime
Mal que mal yo voy a educar
A los jóvenes de Chile
Yo entregaré el conocimiento
Para hacer con ellos
Una sociedad más justa.
Yo sigo aquí en pie
Y moriré con los bototos bien puestos.

Entonces que quiere?
Me preguntará algún caballero.

Yo sólo exijo que se mantenga
El máximo de tiempo posible
Leyendo y estudiando.

Yo exijo que el Estado
Cancele la totalidad de mi arancel.

Exijo ser alimentado
En el Congreso de la República.

Exijo que se me mantenga
Como las tribus lo hacían con sus viejos.

Exijo que la moneda de cambio
Sea la sabiduría.

Exijo que se nos de un lugar a los soñadores
Para que podamos morir felices.

RAÚL ANDRÉS QUEZADA Abr. 2007