CUCARACHA

Te cacé…al fin te cacé , gritaba el hombrón mientras llevaba al niño colgando entre sus gordos y peludos dedos . Ahora sabrás lo que te espera, decía, mientras lo entraba al interior de una oficina llena de papeles y cajas.
Allí revisó bolsillo tras bolsillo de la camisa que lo cubría , lo desnudó y y hasta llegó a abrir sus flacas nalgas para comprobar que no llevara algo escondido….sólo cayó de los pantalones , un pancito y una tripa de paté.

Las facciones del guardia del supermercado se fueron suavizando y sus dedos, antes garfios, se tornaron leves , en un simulacro de caricia.
- ¿Cómo te llamas?
- Cucaracha, dijo el niño.
- Pero ese no es nombre, es un apodo..
- No conozco otro, señor. Todos me llaman Cucaracha, por mis piernas flacas y mis manchitas en la cara.
- ¿Tienes padres?
- -No señor, vivo en el río, solo.
- -¿Desde cuando?
- -No lo sé…toda mi vida, parece que ahí nací.
- ¡Pero estabas robando!
- No señor, lo saqué porque es mi comida del día.
El guardia movió la cabeza y trató de ocultar su emoción.
-Quédate aquí …espera un rato. Te llevaré a otro lugar.
El niño se sentó, durmiéndose en seguida.
El guardia apareció con un café , pero no lo quiso despertar
Se veía tan hermoso y tan desvalido en el sueño.
A la salida del turno lo encontró despierto…..no había rastros del café. Lo tomó de la mano y lo condujo a su casa. Su mujer lo esperaba con la cena.
¡Otro más! , dijo.
Sí ,dijo él, otro más………..pero creo que éste es el nuestro. Será el hijo…..nuestro hijo. Él sólo robaba para comer.