Matusalem siempre leyendo.
No abuelo, dijo la voz,
no es para ti, es sólo una historia divertida. Qué manía la suya.
Todo mundo habla del lobo, lo defienden, lo rescatan, lo operan; pero nadie habla de esa abuela abandonada en el bosque, esa pobre anciana recluida en solitario allí en su cama.
Sola, sin nada que comer, esperando a esa nietecita medio burra que arruinó todo. Los psicólogos dirán, "pero si es una niña". Como era fin de semana, su madre decidió suspenderle el ritalín,para que no ande como tonta y se quede dormida a mitad de camino. Claro, justo, todo es coincidencia. La niñita hace todo lo contrario, no por nada el ritalín, señor lector, piense, no la justifique.
Pero volvamos al tema de la abuela abandonda.Ya se dará cuenta el lector que los rumores y los chismes terminan por imponerse...por eso conocemos sólo una versión de la historia.
Ella, en realidad, tenía una cita con el lobo, todo fue un truco, eso de preguntarle a la niñita, nada, era para que la chica se asustara y se regresara, que la abuela tendría su festín.
Entró el lobo y la abuela ávida de juegos carnales, desnuda y algo regordeta se avalanzó sobre él que chillaba de gusto...
Cuando la abuela perseguía de nuevo a su lobo, ella toda hambrienta, insaciable, mira por la ventana y ve venir por el sendero a su inoportuna nietecita. Sin ropa se mete a duras penas al armario, no sabemos si por lo entradita en carnes o por el juego amoroso interrumpido. El lobo de nervios se pone la ropa de la abuela, justo en ese instante se abre la puerta y aparece Caperucita con sus tontas preguntas. El lobo resoplando le responde cualquier cosa, porque ya sabemos que de verdad se habia comido a la abuelita.
Pero el cuento no acaba así como así. Esta abuela ninfómana también tenía una cita con el leñador que viene feliz, muy perfumado y con una máscara, nadie sabe el porqué; a la hora convenida. La abuela infiel, mujer al fin, descubierta en su traición, se pone a dar gritos,verdaderos alaridos y el leñador obnubilado ante la desnudez carnosa de la hembra, persigue al lobo y ya sabemos lo que ocurrió.
Pasaron los días y la hija algo arrepentida, decide hacer uso de la tecnología, celular nuevo y banda ancha de internet, también We Fe, todo sea en nombre de las comunicaciones.
EPÍLOGO
La abuela se instala cada día frente a su flamante notebock, busca una imagen sensual y como si nada la cuelga en Loscuentos,net. Causa furor, los lobos se abalanzan a elogiar sus curvas, su sensual forma de escribir...
Y la historia se vuelve a repetir.
FATAMORGANA
Patricia Lara Arriagada
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