Soledad, sin ti soy muy violento. Déjame trenzar en tu cabello un perlado de fuego espeso, y en la madrugada fría, juro que envuelvo en tu espalda, un botón de rosa negro.
Soledad, levántate a las horas en que no existo y nomás transito. Cose alerces y lengas quemadas a este paisaje marchito, aviéntame a las borrascas y surte de carne a mi apetito
Soledad, arranca del techo mi piel leñosa y mal tatuada. Hunde tu mano en mi pecho, come de mi tierra parca, refresca un beso mi hombro y enjuaga esta voz amarga
Soledad, vuelo tras de tu cuello vociferando noticias tristes, enuncio amaneceres venideros que desplazan música libre. Nuestros oídos arrullan sinceros, cariño fuerte, cariño firme.
Soledad, te agarro en la calle y desenvaino mi hambre larga, abuso de las espuelas, contraigo una peste bárbara, asolan en las esquinas los perros viejos y un Sol que aplasta.
Soledad, yo tengo billetes a una comarca maravillosa, allá los vampiros lloran flores de loto y navajas rotas. Al mediodía salen cansados y sueñan contentos una derrota
Soledad, en mi guayabera hay estampado un desierto entero, por la tarde es una agria duna, por la noche un maldito infierno y en las mañanas canta tu nombre clamando descanso, gritando nervios.
Soledad, tu nombre me avisa que eres azúcar muy peligrosa, en las curvas te vuelcas y nadas, y en esta recta escabrosa eres la última leyenda de cordura armoniosa
Soledad, te regalo mis ojos para arrancarlos con un capelo, en mi puño descansa un dios sólo, que reparte mareas y truenos, ahoga inmisericorde y electrocuta a los gamberros
Soledad, promete que nunca te arrepentiste de adormecerme, que de las llanuras veías mi cordillera de rojo y verde y en ella pudiste atisbar mis brazos, reblandecerme
Soledad, yo vi que en la costa las golondrinas y los albatros, reían de verme tan lerdo, tratando de armar desacato, con sales, conchas y rocas celestes en vez de arrebatos
Soledad, estornudo plata, cobre, litio y oro macizo, trago el mar y miro tu rostro, bebo vino malherido, sudo arena, corro desnudo, me acurruco a tus pies vencido
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