Todo aún seguía su curso
el cielo aún era gris, mi dedo el tuyo
Cobain cantaba Lithium por tercera vez
cuanod de pronto inrrumpió algo en tu mente
Un pensamiento similar a algún otro
como cuando una melodía salía de tus dedos
y te llenaba en el alma entera,
como un fuerte inhalar,
pero sabías que ese no era el ritmo
eso no debía ser y lo descartabas...
Un par de veces más, o quizá tres
y tenias la perfección melódica
perfecta para tus sentidos y tu voluntad.
Era un cOver, pero era tuyo
El repentino pensamiento de ahora
sufrió este proceso más rápido aún
tan veloz e intempestivo,
inesperado en realidad
como el útimo día que estuve allí..
a tu lado y en tus brazos,
en tus labios o en tu voz,
en tu anillo, en tu silencio..
Evocaste un recuerdo donde no estaba yo
me lo contaste en forma de canción
era el pasado de tus intentos de muerte
obviamente no estaba yo...
Llegué a tí y empapé tu guitarra
yo lloraba y t odiaba
un segundo más tarde
mi alma había muerto,
ahora.. ahora debías morir tu
Desplegué con cautela un puñal
de mi razón inerte
Intentabas otro acorde
y yo, un fuerte abrazo como jamás hubo
y alojñe en tu vientre un fuerte puñal
Sangrante me hablaste de amor
nunca lo habías hecho antes,
no era para tí un sentimiento
sino un pequeño orificio por donde
vemos de manera distinta
la sumatoria de nuestras vidas
Todavía la sangre te daba fuerzas
para fusionar tus últimos aires y gemidos
con la vieja guitarra de tus años...
Jamás había oído melodía como esa
ahora que te pienso y recuerdo,
todavía con pasión y odio,
anhelo escucharla otra vez
ver tu rostro y entrar en tu voz
desde mi razón aún inerte
para sonreir contigo y compenetrar miradas
Regresaría el tiempo, para morir los dos
en un sueño, en el viento, en una madrugada lejana
morir en realidad en materia y alma
y de haber eternidad
ponerle letra a la última melodía