Hombre casi cansado que camina por la orilla de la línea férrea, punto de lanzar el abismo , eterno...
Le has ganado al tiempo y no por casualidad el numero ochenta y uno acompaña tu camino, entre ochenta y un vestigios entre diademas, poemas, ocho nietos
Y un bastón iluso sujeta tu piso y baila con tu pulso
Ahora, no eres anciano, tampoco un abuelo
Eres el mas sabio de los niños, un adolescente experimentado, un bebé de cabello blanco y mi señor, un rey de las flores, un todo, hombre
Tus dulces por fin han sido un placer de la vida, exquisitamente prohibido y permitido
Y estas mejor que nunca, mejor que todos nosotros que nos rodeamos de polvo mientras lloramos los días y tu te ríes, te ríes de nosotros, que parecemos tontos ante tanto miedo, y tu confianza me traspasa como cuando tomabas mi mano y salíamos a caminar...
Tu letra fue perdiendo la forma, y son solo olas, olas maravillosas que chocan incesantemente con la realidad que a veces te alcanza, pero no te preocupa, hay mas de todo, mas ganas de vivir también hay, como sea....
Hay amor, y así como eres, te quiero... |