Esto es una queja formal. Sírvase de de entregar a un director.
De un punto hasta hoy las cosas se han complicado enormemente. Ambos sabemos con exactitud cuando fue ese punto, cuando se cumple un año de esta dulce tortura.
Antes de conocerlo yo era libre, libre de guardar silencio por días y meses, libre de tener que dar explicaciones y de depender de unas manos ajenas a las mías. Hoy, en cambio, me veo forzada a explicar cada una de mis ausencias, si no una culpa horrible me hiere, soy esclava de un computador que me une a ese hombre que quiero sin querer. He perdido mis idas y venidas por los senderos del silencio, he ganado una visa en el país de las nomeolvides. Ya ni siquiera me atrevo a jugar con lo único mío que tengo, ya ni me atrevo a jugar con mi vida como antes. Esto es absolutamente injusto, increíble y molesto. Ya no puedo jugar con mi vida como si nada, ahora hay quien me alegará, ya no puedo desangrar mis penas como si nada. Compleja situación.
Ud se ha puesto a pensar en lo adictivo de nuestra amistad ¿? Se da cuenta que consume mis escasas fuerzas ¿?Ha detenido sus ojos, esos que todo lo ven, en el hecho que me consume lentamente un deseo de tenerlo cerca, de hablar con fluidez y acentos curiosos¿?Es capas de vislumbrar el hecho que hace meses debí darle el ajedrez de chocolate, solo por hacerlo?
Debo quejarme porque se ha puesto a sanar heridas que me gustaban abiertas; debo quejarme porque me hace creer que hay cosas buenas esperando y detesto aquello. Me debe perdonar la rudeza, pero maldigo su hermosa compañía. Detesto haberme sometido a un cariño que ni logro comprender. Me enferma la sorpresa preparada por una bruja, me enferma haber perdido la noción de soledad. Me arrebato hasta eso, ya ni siquiera logro sentirme sola, cómodamente sola. Es un simple y vil ladrón de vida, un cruel mago que lleno de fantasías mi miseria.
Si viese lo mal que van las cosas, en días como este, cuando que no aparece, me daría la razón. Ud seria capaz de liberarme de su encantadora y terrible presencia, y aun así me tendría mendigándole. Si mendigo su amor, su cariño, su atención… por primera vez creo que alguien, aparte de mi misma, es de confianza para querer a ciegas. Me siento como un ratón a su merced, gato ladino, pérdida entre sus juegos de palabras y ademanes de caballero. ¿Quién se ha creído para devolverme la vida, para hacerme sentir un poco mejor conmigo misma? ¿Quién le dio el permiso para dar vuelta todo con su inigualable parecido?
Me quejo ante usted, con mi infinita humildad, para exigir respuestas a tantas preguntas que aun ni consigo formular. Ud al final parece saber cosas que ni sospecho, cosas de mi misma y del mundo. Es curioso que un extraño cualquiera fuese un doble exacto con errores de cromosomas y unos años mas…
Me quejo con rabia y pena, con alegría y risas; ud es el único culpable de la persona que intento ser, algo mejor, algo peor… Pero me quejare por haberme robado las últimas gotas de mi miserable libertad.
Atte una niña perdida en la sombra de su universo.
Pd: Las margaritas del campo me preguntan con sus pétalos si mis cabellos les revelaran el secreto de sus amados…. Así que como flor plantada le ofrezco la oportunidad de conocer el futuro.
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