En realidad no recuerdo ni quien es, sólo me ligaba a ella para poder sentirme más cercano a alguien.
Fue una gran persona con la que compartimos mucho, y una de esas cosas que compartimos y que sería al parecer la última fue la planeación de un viaje, estábamos en casa empacando las cosas para el viaje en el cual iba a ir ella, no tenia entendido como iba a ser, un personaje muy cerca mi me ofreció vino y hasta donde creí las cosas iban excelente, de acuerdo a lo planeado, íbamos a ir mi hermano y unos amigos míos y de esa persona, pero lo que infecto mi vista desde la que sería la última vez que la vería fue alguien más, que catalogue como “inesperado” el hecho es que en medio de la confusión surrealista que llevaba antes de poder salir de viaje necesitábamos unos comprobantes de no se que, y pues para agilizar la tan anhelada salida yo me ofrecí a sacarlos en un sitio cerca, pues ignorando lo que sucedía, cuando fui por primera vez logre sacar el maldito papel para poder navegar libres, pero, cuando volví eso inusual que ahora estaba convirtiéndose en algo inmiscuido estaba demasiado cerca de mi prospecto, más de lo habitual, creo recordar que para ese entonces ya estaba invisible para ella, pero decidí confiar en las vueltas de la vida, y saber que las vueltas me las iban a dar a mi , cuando decidí empujar a los demás para que pudiésemos salir definitivamente se presento el problema de otro papel en ese mismo lado pero esta vez no fui solo, todos me iban acompañando, hasta eso que me producía bastante desconfianza, y antes de entrar por esa puertecilla roja de almacén pueblerino, algo me paso por el espinazo, como un electrochoque, que me conmociono, y al voltear con el rabillo del ojo mi mente borro el suceso que sabía tenia que suceder, entre esos dos intrusos de mi juguetona mente y respectivamente salí de allí, casi como si algo dentro mió me defendiera de lo que no quería ver, y me fui... dejando todo atrás sin explicación, todo se fue para la mierda, y nadie me acompaño, siempre me vieron como el de las decisiones mal tomadas, el que nadie tomaba en cuenta para algo colectivo, y deje que saliera ese dolor, destilando por mis venas mientras se quemaban intensamente en la hoguera del deseo frustrado, y perdí el conocimiento, lo próximo que vi fueron dos caras muy familiares, de las personas más he querido, estaban allí pendientes, lo que podía deducir en mi patético estado es que estaba en un carro, y ellos ya tranquilos de verme despierto, con los entumidos, perdidos, ajenos a lo que siempre fue alguien alegre y vulgarmente cuerdo, ya era bastante, ya había pasado antes y había caído de nuevo, como si mis reflejos fallaran a la muerte prominente, y mi odio más la frustración me hicieran recordar todo hasta antes de la perdida de conocimiento, en ese momento sólo pensé en retomar el camino del viaje, pues tratando de asimilar que son cosas que pasan, pero que aún se conservaba algo de cariño de amistad pero es donde la amistad llega a tener unidades de medida, y razones para ser llamada "palabra" más no sentimiento, yo pedí que por favor siguiéramos, que fuéramos de una, hubo un silencio prolongado que me hizo sentir como un pequeño regañado, y ambos me respondieron con la cabeza baja y algo de rabia, que "pues... en realidad vamos para la casa, por qué al vos perder el conocimiento todos, especialmente ella dijeron que vos lo único que siempre hacías era cuasar problemas, un estorbo para poder vivir y salieron inmediatamente después de verte en ese estado deplorable en el que estabas" según entendí por eso perdí mi conocimiento para expulsar mucho dolor guardado y acallado de mucho tiempo, al tratar de ser mejor pero me di cuenta que lo único que sería siempre seria un utensilio listo para los demás, cerré los ojos y cuando los abrí de nuevo tenia un cigarro en la mano y estas dos grandes personas al frente mió, mirándome, pero no juzgándome, si no espectando ese dolor que emanaba por mi suspirar, y empecé a hablar de la vida y sus caminos que acaban siendo para alguien más, el trabajo de alguien no reconocido recorrido por quienes lo merecen, apagamos el cigarro y el dolor se apago con el, sólo sabia que era un paso más en esta maratón de dolor, y ya estaba en calma conmigo, tranquilo y no tranque más el rió del desespero, me fui con el y lo deje que siguiera viviendo, cerré los ojos y cuando los abrí... En realidad no recuerdo ni quien es, sólo me ligaba a ella para poder sentirme más cercano a alguien.
Fue una gran persona con la que compartimos mucho, y una de esas cosas que compartimos y que sería al parecer la última fue la planeación de un viaje, estábamos en casa empacando las cosas para un viaje en el cual iba a ir ella, no tenia entendido como iba a ser, un personaje muy cerca mió me ofreció vino....
¡Y AHÍ DESPERTE EN MEDIO DEL DESESPERO DE LA DUDA Y EL SABER DE LOS SUEÑOS!