TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / antoniaesperanza / Son las 7:30

[C:34027]

Tengo que llegar, tengo que llegar, no puedo atrasarme más.
Señora, disculpe, me puede decir la hora?
Sí, claro, son las 7:30.
Gracias.
Señor, disculpe, le pasa algo? Es que tiene...
No, no se preocupe señora, no es nada, un rasguño solamente.
Dijo eso mientras se arreglaba la corbata, y se paretaba contra sí cada vez más el nudo.

Aquí está el dinero.
¿ Te costó mucho trabajo?
No, sólo con algunos calmante y ya está.
Mira tú, saliste habiloso chiquillo, se te ve bien inteligente.
Bueno, eso es lo que dicen.
Cambiando de tema. Tuve un problema con el cheque.
( ¡¿Y este guatón que se cree?!)
Que problema sería.( frente preocupada, ceño arrugado)

Mientras dijo esto, se arreglaba la corbata para despegarse el nudo un poco de sí.

Mira, Juan, es que el banco me canceló los cheques por 30 días, asi que trendré que pagarte de a poco con mi dinero, pero si quieres puedes esperar hasta que me devuelvan mi chequera.
No, prefiero que me pague de a poco, tengo un deuda urgente.
Esta bien, puedes retirarte.

Señora disculpe, me puede decir la hora?
Sí, claro son las ...disculpe, lo conozco? tiene cara conocida.
No, no lo creo, no soy de aquí. Y la hora?
Son las 7:30.
Gracias.

Se alejó mientras yo me arreglaba el nudo, no puedo creer que fuera tán imbécil para hablarle. Y eso que sus ojos se clavaron en los mios.
Sus oidos en mis sonidos.
Y sus pensamientos en mí.

Obviamente la pudo abrir con facilidad, costó pero pudo. Rechinó pero la silenció. Sigiloso irrumpió, destrozó el silencio inmaculado, la infancia dormida, la niñez propia y apropiada de ella.

Mamá, llegaste?- gritó desde el segundo piso.
( silencio)

Me quedé pasmado con su voz, que era como un caramelo con sonido, una terrible y dolorosa dulzura.
Subí observando, las fotos me dolían cada vez más, sus ojos eran iguales a los de ella, sus oídos los sentía, pendientes de los míos, y sus pensamientos absueltos en mí.

Abrió su pequeña puerta, le tapó la boca con un pañuelo rojo, y cuando estaba en silencio, y después de haberle rasguñado su frente, le dió los calmantes, la durmió entre las sábanas, le quitó la ropa...

Saqué el dinero lo más rápido posible, y salí por la puerta trasera.
Tengo que llegar, tengo que llegar, no puedo atrasarme más.
Señora, disculpe, me puede decir la hora?
Sí, claro, son las 7:30.
Gracias.


Texto agregado el 11-04-2004, y leído por 183 visitantes. (1 voto)


Lectores Opinan
15-04-2004 bastante subjetivo y surrealista... je je aquo
14-04-2004 Muy entretenido y con un ritmo bastante rápido. Me gustó. SicFaciuntOmnes
13-04-2004 me gusto, esta muy bueno, un millon de estrellas para ti, saludos desde muy lejos conector
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]