Ante la bendición del cura nos tomamos de la mano en un rosario de oraciones: mi amiga; su esposo; el padre; los hijos y yo, junto al último eslabón de la cadena ya hecho féretro... (Hecho real junto a una amiga en el velorio de su madre) Ana Cecilia. ©
Texto agregado el 10-04-2004, y leído por 371 visitantes. (8 votos)