Sólo recuerdo los soles del atardecer, mientras mi alma aún perdura en el incendio de sus vidas. Satán.
Después
La cena estuvo magnífica entre sus comensales, salvo por su finitud en el inexorable tiempo. Jesús.
Ana Cecilia.
Texto agregado el 28-03-2003, y leído por 390
visitantes. (6 votos)
Lectores Opinan
28-03-2003
"mi alma aún perdura en el incendio de sus vidas"... muy buena frase, de esas de antología... muy bueno este trabajo, profundo, sútilmente profundo... blanquita